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El Décimo Tribunal Colegiado en materia Administrativa revocó 15 suspensiones provisionales que otorgó un juez de distrito del Estado de México a los habitantes de la entidad contra el rediseño del espacio aéreo del Valle de México que se estableció para la operación del aeropuerto Felipe Ángeles.
Los magistrados declararon fundados los agravios que presentaron la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) y Servicios a la Navegación del Espacio Aéreo (Seneam).
Las autoridades argumentaron que detener el rediseño implica un daño relacionado con la necesidad de seguridad en el traslado aéreo de personas y bienes en el país.
Al darles la razón jurídica, los magistrados afirmaron que la modificación en las operaciones aéreas constituye una acción que corresponde a las pretensiones de la colectividad, encaminadas a obtener un beneficio para todos sus integrantes.
Lo anterior, abundaron, en la medida en que propugna la prestación del servicio público aeroportuario atendiendo a las necesidades del país, propiciando la adecuada operación de la aviación civil.
Los ciudadanos solicitaron la protección de la justicia federal al considerar que el rediseño afecta su derecho a vivir en un medio ambiente sano al pasar los aviones a una distancia “considerablemente” cerca de sus hogares generando ruido excesivo.
En los juicios de garantías consideraron que la SCT y Seneam deberían volver a utilizar las rutas de aeronaves establecidas con anterioridad.
Por su parte, la Asociación de Colonos de la Herradura ratificó ante el Juzgado Quinto de Distrito en materia Administrativa el desistimiento de la demanda de amparo que presentaron sobre este tema.
Al otorgarse las primeras suspensiones, la SCT y Seneam manifestaron que el rediseño no se puede modificar de un día para otro y que tardaría al menos tres meses volver al sistema de operación anterior.