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En las citas y consultas a las que asistan los derechohabientes, el personal del IMSS y del ISSSTE estará obligado a atender “con amabilidad, eficiencia y dignidad”, ordenó la Cámara de Diputados en las leyes de ambas instituciones.
Por unanimidad con 475 votos, el peno de los legisladores aprobó reformas a los artículos 303 de la Ley del Seguro Social y 29 de la Ley del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado, para que ambas instituciones “implementen, de forma periódica y programada, estrategias de capacitación y actualización en materia de ética y protocolos que aseguren una atención digna y eficiente a los derechohabientes”.
Lo anterior, con observancia del respeto a los derechos humanos, no discriminación e igualdad de género, ordenan las reformas a la ley, remitidas al Senado de la República para sus efectos constitucionales.
El dictamen también precisa que “los servidores públicos del IMSS estarán obligados a observar, en el cumplimiento de sus obligaciones, el principio de buen trato en la prestación de los servicios y en la atención a los derechohabientes”.
Lamenta que “a pesar de que existen diversas reglas que establecen la obligatoriedad de los servidores públicos de dar una atención de calidad, con ética, calidez, buen trato, igualdad y sin discriminación, existen miles de denuncias de maltrato a derechohabientes por parte del personal médico y administrativo tanto del IMSS como del ISSSTE”.
También menciona que, según datos de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) en su sistema nacional de alerta de violación a los derechos humanos, “el IMSS encabeza la lista de dependencias del gobierno con más quejas y en el periodo de enero a septiembre de 2021 tiene mil 950, y el ISSSTE le sigue con 712 quejas”.
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Al fundamentar el dictamen, la presidenta de la Comisión de Seguridad Social, la diputada Angélica Ivonne Cisneros Luján, de Morena, explicó que el propósito es “robustecer los procesos de capacitación al personal de salud de dichas instituciones, a fin de que implementen en forma periódica y programada las estrategias de capacitación y actualización en materia de ética y protocolos”.
Recalcó que “se trata de reflexionar y mejorar en materia de la preservación de los derechos, la no discriminación y la igualdad de género”.
Expresó su convicción por “buscar todos los caminos posibles para que la atención a la salud de las personas derechohabientes se brinde siempre con calidad y profesionalismo”.
Afirmó que esta reforma “refuerza además el código de ética de las personas servidoras públicas del Gobierno Federal en el que se establece la obligación de brindar un trato digno”, dijo.