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El parque Xenses, propiedad del Grupo Xcaret, fue multado con 150 mil pesos, a raíz de las circunstancias que dieron lugar a la muerte del menor duranguense Leo Luna.
Los criterios que sustentan la imposición de la multa consisten en que Xenses no activó los protocolos de prevención y tardó cuatro días en reportar el accidente que le costó la vida al menor.
El documento de sanción señala que el personal de Xenses no aplicó mecanismos de seguridad y protección vigentes, según los cuales, cuando ocurre un accidente, los empleados del parque (en tanto primeros respondientes, categoría que se da a los primeros que atienden o intervienen en el suceso) debían activar los protocolos de seguridad, proporcionar primeros auxilios a la víctima o a las víctimas, ejecutar, si es el caso, medidas de reanimación cardio-pulmonar y después hacer el reporte al número de emergencia 911.
Este procedimiento no se efectuó en el caso de Leo Luna. Se le trasladó a un hospital privado, donde fue estabilizado, aunque murió horas después.
Las autoridades judiciales, entretanto, prosiguen las investigaciones por homicidio culposo.
El pasado 27 de marzo, un “error humano” provocó que el menor fuera absorbido por el sistema de filtración de una atracción del parque Xenses, conocida como ‘Río Salado’.
El cardiólogo Miguel Ángel Luna, padre de Leo, declaró a medios que no recibió el cuerpo de su hijo hasta que firmó un perdón a favor del parque Xenses, condicionado por los asesores jurídicos de Grupo Xcaret.
El ‘Río Salado’ fue clausurado por las autoridades mientras se llevan a cabo las investigaciones.