:quality(70)/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/elfinanciero/WTR7L5FFQNCATNSPBNDOCWHQKI.jpeg)
En un esfuerzo propio, productores locales de uva acordaron unir esfuerzos para lograr varias metas, entre ellas la de promover el enoturismo, el cual se realizará en áreas de cultivo de la vid y en la producción de vinos, dijo Rosa Paola Valdez García al anunciar la formación de la Asociación Vitivinícola de Nuevo León.
”Estimamos un crecimiento muy significativo de la industria y adicionalmente estaremos en condiciones de promover el enoturismo, con un mercado potencial de miles de visitantes a los diversos viñedos en temporada de vendimia fiesta de la cosecha de la uva la cual fortalecerá económicamente las diferentes regiones”, señaló la presidenta de dicha asociación en rueda de prensa.
Valdez señaló que próximamente trabajarán con prestadores de servicios como transporte, hoteles y restaurantes, entre otros, para armar los viajes a los diferentes viñedos del estado.
Los municipios donde se cultiva y elabora el vino son Allende, Bustamante, Cadereyta, García, Higueras, Linares, Montemorelos y Santiago.
En tanto, las variedades de uvas que se cultivan son principalmente Cabernet Sauvignon, Carignan, Columbar, Garnacha, Merlot, Shiraz, Tempranillo y Pinot Noir.
Valdez dijo que los vinos que hoy hay en Nuevo León son boutique, y actualmente estos productos no se encuentran en los supermercados.
En este punto, reveló que proyectan estar presentes en las tiendas de especialidad, pero que eso será en un futuro.
La directiva dijo que en la asociación hay 11 firmas fundadoras que representan 32 hectáreas de vid en total, con una capacidad de producción de 160 toneladas de uva, y una vez transformado en vino para su comercialización, alcanzará un valor económico de 75 millones de pesos anuales.
Las casas fundadoras son viñedo Garza Moschen, Viña Inés, Casa Quve, Hacienda LH, Vinícola Maravillas, Viñas de Picachos, Viñedo Santa Teresa, Viñedo Linares, Vinos y Viñedos Montérrez, Bodega Dos Mundos y Viñedo Mochuelos.
Estos productores generan 250 fuentes de empleos directos, y hacia finales de 2023 se estarán creando más de 650 puestos directos e indirectos, adelantó Valdez.
La primera vinícola en el estado y que aún está en operación inició en 1996 en Linares, con Fernando Gracia, mientras que la primera botella elaborada enteramente en Nuevo León se dio en 2006, de Cabernet Sauvignon, de la Vinícola Maravillas, ubicada en García, y perteneciente a Ramiro Valdés.