Grupo Televisa presentará este lunes, tras el cierre de mercados, resultados débiles en el segundo trimestre del año, al arrastrar -aunque en menor medida- la contracción mostrada en los segmentos de publicidad y las desconexiones en televisión de paga, de acuerdo con el consenso realizado por El Financiero en seis casas de Bolsa.
El estimado refleja que las ventas de la televisora controlada por Emilio Azcárraga Jean tendrán un avance de 0.7 por ciento respecto al mismo periodo del año anterior al pasar de 23 mil 524 millones de pesos a 23 mil 683 millones de pesos.
En tanto que la utilidad neta se elevaría 39.1 por ciento al llegar a mil 971 millones de pesos desde mil 416 millones.
Por el contrario, para el flujo operativo (EBITDA) se proyecta una caída de 4 por ciento al pasar de los 9 mil 680 millones de pesos entre abril y junio de 2016 a 9 mil 286 millones de pesos en este periodo.
Martín Lara, analista de la Casa de Bolsa Interacciones, anticipó que las ventas se mantendrán estables y que el flujo operativo (EBITDA) tendrá una caída mínima.
Además, estimó, estos resultados podrían tener un efecto negativo de corto plazo en el precio de las acciones de televisora, aunque sugiere que cualquier ajuste debe aprovecharse dado que las perspectivas de mediano plazo de la empresa son alentadoras.
"Los negocios centrales son TV de paga y TV abierta, y después ya el resto de los negocios, que no tienen tanto peso respecto al consolidado. No es un gran trimestre para la televisora pero esperamos que en la segunda mitad del año reboten sus principales divisiones", comentó.
Por su parte Intercam Casa de Bolsa señaló que no percibe un buen trimestre para las empresas del sector de telecomunicaciones debido a factores estacionales, presiones competitivas, moderación de las tendencias de trimestres pasados para los segmentos con mejores comportamientos y en algunos casos, hasta por el desempeño económico de países clave.
"Creemos que Televisa será una de las empresas negativas del trimestre, además de una base comparable complicada pues Semana Santa es una temporada de bajas ventas en publicidad, afectada además por la presión competitiva en TV abierta y el hecho de que el beneficio de los buenos ratings que últimamente ha tenido Televisa se trasladen en beneficios monetarios para la segunda mitad de 2017", señala en su análisis.
Además, para el segmento de cable estima que la desaceleración en el crecimiento de ventas y EBITDA se prolongue, debido a la difícil base comparable del mismo lapso de 2016.
En tanto, en Sky suponen que no verán adiciones dado que los paquetes de prepago seguirán afectando el nivel de los usuarios.
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