Pese a que en los primeros nueve meses del año la demanda en Nuevo León de espacios en el sector industrial mantuvo una tendencia positiva, no fue suficiente para absorber el incremento en la oferta que se registró en el mismo periodo, por lo que la disponibilidad en este segmento se incrementó a 6.66 por ciento, señaló Colliers Monterrey.
“La tasa de disponibilidad del mercado industrial de Monterrey en el tercer trimestre del 2025 se registró en 6.66 por ciento, 4.4 puntos porcentuales superior a la registrada en el mismo trimestre del año pasado”, indicó.
“Aunque hay señales de desaceleración y reajuste, el mercado industrial de Monterrey se mantiene activo y atractivo para inversionistas, especialmente por el impulso del nearshoring y la construcción de nuevos espacios industriales”, comentó.
Agregó que se registró un incremento en la presencia de edificios en subarrendamiento dando un total de alrededor de 100 mil m² disponibles para este tipo de renta, este fenómeno marca el mayor volumen de desocupación en tres años y refleja una nueva etapa de reajuste tras el boom del nearshoring.
Colliers detalló que la actividad neta acumulada durante el tercer trimestre del 2025 se registró en un millón 704 mil 044 metros cuadrados (m²) de transacciones de espacios clase A y B, en los submercados de Monterrey, esto representa una caída de seis por ciento con respecto al 2024
Durante el 2025, ha habido una desocupación considerable de espacios, lo cual genera incertidumbre en el sector, aun así el mercado sigue activo y siguen llegando más inversiones a Monterrey, explicó.
Al cierre del tercer trimestre, se tienen monitoreadas mil 923 naves clase A y B en Monterrey, que suman un total de 24 millones 311 mil 441 m², de los cuales el 61 por ciento son edificios clase A y el resto clase B.
El mercado industrial al cierre del trimestre en cuestión, registró un incremento en el inventario por un millón 29 mil 234 m², mayor al del mismo lapso del año pasado, cuando fue de 510 mil 377 m².
La empresa explicó que factores como la política comercial internacional, la presión sobre la infraestructura energética y el aumento de inventario especulativo han influido en la dinámica económica, pero que a pesar de estos retos, Monterrey conserva su atractivo para inversionistas gracias a su ubicación estratégica, su infraestructura consolidada y su mano de obra calificada.
Detalló que las oportunidades de crecimiento se centran en la automatización, la digitalización industrial y el desarrollo de sectores como logística, empaque y manufactura avanzada.
La inversión en Monterrey se ha mantenido activa, Apodaca, en particular, ha concentrado buena parte de esta inversión, consolidándose como un polo industrial relevante.




