Cuentas claras, relaciones largas: ¿Cómo ahorrar en pareja y no caer en la quiebra?

Llegó el mes del amor y con ello una oportunidad para que tú y tu pareja comiencen a pensar en opciones de ahorro, que les permitan tener buena salud financiera.

Probablemente, pensar en estos planes te provoque dudas o quizá no sabes por dónde comenzar; sin embargo, es más fácil de lo que crees y aquí te diremos cómo.

Lo primero que debes tomar en cuenta es que tú y tu pareja se deben organizar, comunicar sus necesidades e inquietudes y llegar a un acuerdo sobre sus metas financieras

Para lograrlo, distintas instituciones bancarias contienen guías. Por ejemplo, BBVA recomienda:

• Establecer un plazo para lograrlo. Es común que las parejas dividan sus ahorros en tres: a corto plazo, que pueden ser usados para conseguir metas pequeñas; mediano plazo, para objetivos más complejos y largo plazo para planificar los próximos años, como el retiro.
• Administrar dinero. Se recomienda que ambos junten sus ingresos y destinen de 10 a 30 por ciento cada mes para ahorro. El resto utilícenlo para las diferentes necesidades a cubrir.
• Crear un fondo para emergencias. Lo ideal es tener los gastos de al menos tres meses e idealmente seis. Deben preguntarse cuánto necesitan ahorrar para sentirse seguros y convertir esa cantidad en el objetivo de su fondo de emergencia. Una vez que hayan determinado cuánto necesitan ahorrar, es importante decidir dónde guardar ese dinero.
• Revisar su progreso. Cada determinado tiempo analicen sus finanzas, sumen lo que tienen y colóquenlo en un lugar seguro, como una cuenta de ahorro que revisen con cierta frecuencia.
• Dividir roles y tareas financieras. Designen a quién le corresponderá determinada actividad, quién manejará determinada cuenta y quién llevará el control de gastos. También deben definir cómo serán las aportaciones de cada uno para los gastos.
• Eviten deudas. Deben tener mucho cuidado del mal uso de créditos y evitar endeudarse de más, de lo contrario, los avances podrían verse truncados.

¿Qué es una cuenta conjunta?

Funciona igual que una cuenta bancaria estándar, excepto que hay dos o más titulares en la cuenta. Esta puede utilizarse para combinar el dinero de la pareja.

“Esto ayuda tanto para ahorrar como para gastar, ya que pueden ahorrar para metas en común como una casa nueva o unas vacaciones. Con una cuenta conjunta usted y su pareja pueden pagar los gastos compartidos de la casa, como hipoteca, pagos de automóviles, servicios públicos y compras de supermercado, desde el mismo lugar”, explica Bank of America.

¿Es recomendable tener cuentas bancarias conjuntas?

Esta decisión dependerá de los intereses de cada pareja. Algunas prefieren quedarse con sus cuentas individuales, ya que les permite tener la libertad de controlar el dinero que ganan. Sin embargo, algunas parejas se sienten cómodos al colocar todo el dinero en cuentas compartidas.

Los beneficios de las cuentas conjuntas es que ambos pueden aprovechar algunas opciones a las que quizás no tenga acceso como titular de una cuenta individual. “Eso se debe a que al combinar su dinero pueden cumplir con el requisito de saldo mínimo que se requiere para opciones como estar exentos de cargos por mantenimiento, una tasa de interés más alta o recompensas”.

Para abrir una cuenta de este tipo, consideren que ambos deberán proveer información financiera a la institución bancaria y formas de identificación.

“También podrían agregar a uno de ustedes a la cuenta existente del otro. Como cotitulares de la cuenta, ambos podrán acceder y retirar fondos sin permiso del otro, y cada uno de ustedes podrá hablar con el banco acerca de su cuenta sin el consentimiento del otro”, explica Bank of America.

Cuentas vinculadas para parejas

Si ninguna de las opciones anteriores te convencen, las cuentas vinculadas son una excelente opción porque representan un equilibrio entre las cuentas individuales y las conjuntas.

¿Cómo funciona? Esta cuenta se vincula a otra en la misma institución financiera para poder transferir fondos electrónicamente entre ellas. Por ejemplo, muchas personas vinculan sus cuentas de cheques y de ahorros para poder transferir fácilmente fondos electrónicamente entre ellas

“Vincular permite que las parejas mantengan un control independiente de sus cuentas de cheques, al mismo tiempo que comparten una cuenta conjunta desde la cual pueden pagar servicios, administrar los gastos de la casa, contribuir a los ahorros y manejar otras responsabilidades financieras cotidianas. De esta manera, tienen un espacio compartido para depositar dinero para los gastos mutuos o para metas futuras”.