Mientras que algunas actividades económicas padecen el encarecimiento del dólar, el turismo disfruta de los beneficios que trae.
Desde el último día de 2012 a la fecha, el dólar se encareció 39 por ciento, al pasar de 12.87 pesos, a 17.92, según datos del Banco de México.
A la par, el número de pasajeros aéreos internacionales de las aerolíneas mexicanas alcanzó 8.9 millones viajeros entre enero y noviembre de 2015 (últimos datos disponibles), un alza de 69 por ciento respecto a los 5.2 millones del mismo periodo de 2012.
En el mismo periodo, los viajeros con destinos domésticos crecieron 32 por ciento, de acuerdo con datos de la Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC).
"El mayor aumento en el tráfico de pasajeros se debe a que la demanda incrementó por el tipo de cambio, las inversiones en el país y hasta porque hay una relativa menor competencia en el mercado internacional, es decir, hay rutas y destinos en el extranjero menos saturados que en el mercado nacional", comentó Marco Montañez, analista de Vector Casa de Bolsa.
El experto explicó que el dólar caro ha hecho más accesibles los destinos turísticos nacionales, que los internacionales, y por otro lado, se ha incrementado la demanda de pasaje a nivel internacional.
José María Flores, analista de Ve por Más, dijo que ante la mayor demanda, las aerolíneas han respondido con el crecimiento de sus flotas, es decir, con más asientos y mayor capacidad de vuelos internacionales.
En ese sentido, la oferta de Aeroméxico, que atiende a cerca del 62 por ciento de los viajeros extranjeros entre las aerolíneas mexicanas, medida en Asientos por Kilómetro Disponibles, (ASKs, por sus siglas en inglés), alcanzó entre enero y diciembre de 2015 un total de 26 mil 262 millones, un crecimiento de 15 por ciento, mientras que para el doméstico, el incremento fue 6 por ciento.
Fernando Flores, expresidente de la Cámara Nacional de Aerotransportes, destacó que las empresas mexicanas respondieron a la demanda con expansión de flota y están compitiendo con las aerolíneas internacionales, incluidas las más grandes de Estados Unidos: American Airlines, Delta Airlines y United, entre otras.
Otra aerolínea que también observó ese efecto fue Volaris, pues de acuerdo con sus reportes mensuales, la empresa alcanzó de enero a diciembre del año pasado 4 millones 207 mil asientos por milla disponibles, un crecimiento de 37 por ciento, respecto a los 3 millones 81 mil asientos que tenía al cierre del 2014.
Los vuelos origen-destino entre México y el extranjero aumentaron 21 por ciento. De acuerdo con de la DGAC, de enero a noviembre de 2015 dichas operaciones alcanzaron 295 mil 172, desde las 244 mil 350 del mismo periodo de 2012.
En otras palabras, hay 50 mil 822 operaciones aéreas entre México y el extranjero que hace tres años no existían, cuando el dólar comenzó su carrera alcista.
Bernardo Vélez, analista de Grupo Bursátil Mexicano, explicó que las rutas internacionales le dan a las empresas nacionales una cobertura natural ante los costos que están indexados en dólares y por eso se han incrementado y mantenido en la mayoría de los casos.
"Las aerolíneas tienen alrededor de dos terceras partes de sus costos operativos en dólares, como la renta de aviones, el combustible y el mantenimiento, y con la depreciación del peso se elevan sus gastos, las aerolíneas tratan de salir o incrementar rutas internacionales, porque estos son los pasajeros que te van a pagar en dólares y te vas a proteger contra el tipo de cambio", comentó Vélez.
Además del dólar, hay otros factores que han incidido en el crecimiento del turismo internacional en el país, como la promoción turística que ha tenido México en el exterior, así como un mejoramiento de la infraestructura, indicó Jorge Hernández, presidente de la Federación Mexicana de Asociaciones Turísticas.
Tan sólo en los últimos 3 años, el gobierno invirtió casi 2 mil 400 millones de pesos en la promoción turística del país, incluida la que se realiza en el extranjero.
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