:quality(70)/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/elfinanciero/MMEOUZSZ3ZDITDJT4BIV43HWAA.jfif)
Tras la segunda cancelación de la visa al tenista serbio Novak Djokovic, autoridades de Australia emitieron una orden de detención que se llevo a cabo en las primeras horas del sábado en el país oceánico.
De acuerdo con el gobierno australiano, la presencia del tenista puede representar un peligro para “la vida y el orden civil debido al sentimiento antivacunas y al desprecio por las normas del COVID-19″.
Estas medidas se han tomado luego de que Djokovic ingresara al país con una exención médica y sin estar vacunado.
Aproximadamente a las 10:00 hora local Australia, el tenista serbio fue detenido por las autoridades fronterizas del país. Apenas un día antes, el ministro Alex Hawke revocó por segunda ocasión la visa de Novak, lo cual le impediría jugar en el Abierto de Australia.
El escenario indica que Djokovic permanecerá en detención durante el sábado antes de que se emita la resolución del caso.
La respuesta acerca de si el deportista será deportado u obtendrá la permanencia se llevará a cabo en una audiencia prevista para el siguiente domingo 16 de enero. En dicha sesión el gobierno expondrá los puntos argumentativos en los que sostendrá su postura para forzar la salida de ‘Nole’.
De acuerdo con el diario The Age, el gobierno australiano permitió el ingreso de Djokovic, bajo la premisa de la exención, dado que representaba un riesgo de contagio y transmisión bajo.
El tenista había argumentado que dicha exención había sido otorgada por el gobierno del estado de Victoria dado que se había contagiado de COVID en diciembre; no obstante, el gobierno federal determinó que su infección previa no era válida para la extensión de ese documento.
Cabe destacar que hace unos días el tenista admitió en redes sociales que no se aisló después de haber recibido el resultado positivo a COVID.