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Reviven espacios del DF con parques de bolsillo


 
 
Miriam de Regil
 
 

Más de 460 mil metros cuadrados de espacios públicos entre parques, calles, camellones, áreas verdes, lotes baldíos, centros de transferencia del transporte público y plazas en el Distrito Federal han sido rehabilitados y equipados en los últimos diez meses a través del programa Parques de Bolsillo.
 
 
Los Pocket Parks, como también se conocen, son un concepto que nació en Northamptonshire, Inglaterra, a principios de 1980 y que desde entonces se ha replicado con éxito en lugares como Bogotá, Nueva York, Barcelona, Tokio, y ahora el DF.
 
 
Su objetivo es combatir la inseguridad y el abandono de diverso sitios, y al mismo tiempo mejorar el entorno urbano y propiciar la convivencia o práctica del deporte entre la población.
 

En la ciudad de México, en abril de este año, la Secretaría de Desarrollo Urbano y Vivienda (Seduvi), a través de la Autoridad del Espacio Público (AEP), puso en marcha dicho proyecto que este caso tiene como meta, sólo para este 2013, dar vida a 150 parques de bolsillo en las 16 delegaciones.
 

La idea es que se tengan espacios sustentables y accesibles, aseguró Eduardo Aguilar, titular de la AEP, quien además informó que por medio del programa Decisiones por Colonia, el gobierno capitalino tiene actualmente identificado 153 colonias con déficits de espacios públicos.
 
 
"Nosotros los llamamos parques de bolsillo a lugares de entre 300 y 500 metros cuadrados donde se pueden montar áreas de comida, juegos infantiles, gimnasios, o simplemente bancas cuya meta es tener un impacto barrial e involucran a los vecinos en su cuidado."
 
 
Una de las características principales de este proyecto, agregó, es que son áreas fáciles de implementar y ejecutar, además de que "tienen una parte importante de ciudadanización que es lo más tardado".
 
 
 

Para tomar en cuenta
 
 

Para Carlos Delgado Castillo, académico del Departamento de Arquitectura de la Universidad Iberoamericana, el programa Parques de Bolsillo es muy interesante sólo por el hecho de buscar recuperar aquellos espacios "incómodos de esta ciudad", sin embargo para el especialista algo que preocupa es el carácter temporal que puede tener el programa.
 
 
"Estos diseños requieren sobrevivir en un periodo largo, por ello es importante no sólo que la vegetación sea la adecuada para el sitio, sino que en términos de diseño el mobiliario debe ser el adecuado para la zona y no sólo responder a las necesidades inmediatas de la sociedad, pues es indispensable contar con estudios, tal vez demográficos, que ayuden a saber hacia dónde va la población de la colonia, lo cual puede garantizar su permanencia."
 
 
Por ejemplo, dijo, si se tienen juegos para niños se debe pensar en el tiempo que pueden ser funcionales y en las necesidades que estos menores tendrán más adelante.
 
 
En el caso de los espacios donde se ha colocado mobiliario de gimnasio, Miguel Ángel Hernández Mejía, experto en medicina del deporte, alertó que pese a ser una buena opción, el tema debe manejarse con precaución, ya que no es sólo colocarlo y dejar que cualquiera pueda hacer uso de estos aparatos sin antes haber acudido a un especialista para saber si factible practicar cierta actividad física.
 

"Además no tenemos que olvidar que para hacer ejercicio se debe antes calentar para evitar cualquier tipo de lesiones. La idea es buena, pero definitivamente se debería complementar con mayor información e incluso con el trabajo de expertos quienes pudieran orientar o estar al tanto de la gente que quiere utilizar los aparatos."
 
 
Por su parte, Delgado Castillo complementó que en lugares como Río de Janeiro en donde se instalaron diferentes parques de bolsillo con aparatos especiales de ejercicio para gente de la tercera edad se cuenta también con el apoyo de personal especializado en ciertos horarios para atender a la gente.
 
 
"Esto se me hizo muy interesante, y sé que aquí implicaría un costo más alto que valdría la pena considerarlo, pues ello puede contribuir a garantizar el éxito y la vida del proyecto."
 
 
De igual manera insistió en que se necesita cambiar la cultura del cuidado de estos espacios, ya que muchas veces es muy fácil sólo culpar a las autoridades.
 

"Tenemos hoy una oportunidad interesante para que el gobierno termine con esa mala imagen, a la vez que la ciudadanía trabaje en verdad de la mano, pues la chamba es de todos".
 
 
En tanto, Hernández Mejía agregó que es necesario que las autoridades estén siempre al tanto de los parques y que califiquen su efectividad.
 
 
Para echar andar el programa Parque de Bolsillo en México, el titular del Espacio Público detalló que se realizó un estudio de vida pública para poder adoptar el concepto a las actividades del país "dónde salieron cosas muy interesantes como algo muy común que es las personas buscan en muchos casos lugares públicos para poder comer".
 
 
Con el fin de homologar los criterios de diseño, imagen urbana, accesibilidad universal, seguridad, mobiliario, vegetación y revisar ubicaciones, la AEP también elaboró un manual técnico para la creación de los parques de bolsillo; el manual incluye aspectos como las adecuaciones geométricas, accesos, rampas peatonales, balizamiento y circulaciones, además de la vocación de cada sitio.
 
 
"La eficiencia del espacio público recuperado garantiza su funcionalidad, como las instalaciones del Metro, las áreas de espera y de recreación y ahora los parques públicos de bolsillo, de fácil acceso a personas con discapacidad, personas de la tercera edad y niños."
 
 
La inversión que requiere un parque de bolsillo, agregó el funcionario, es variable, pero por lo general cuesta de 500 y mil pesos el metro cuadrado. Para la implantación de éstos el gobierno de la ciudad se coordina con las delegaciones e incluso se llega hacer coinversión con grupos privados.
 
 
"Para garantizar el mantenimiento, preservación y sustentabilidad económica y ambiental de cada espacio se tiene previsto un esquema de participación público-privado. El mantenimiento en los casos que hemos arrancado, el mantenimiento primario: la limpieza está a cargo de los vecinos con la condición de que siempre sea un espacio público no se hace exclusivo para nadie, pues la idea es subir a la comunidad", concluyó.
 

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