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Mario Aburto Martínez es conocido por ser el único sentenciado por el asesinato del candidato presidencial del PRI, Luis Donaldo Colosio Murrieta, en marzo de 1994.
Mario Aburto podría salir de la cárcel en marzo de 2024, tras cumplir una condena de 30 años, el próximo 23 de marzo de 2024, luego de haber obtenido un amparo por parte de un Tribunal Colegiado, a través del juicio 104/2021.
En un principio, Aburto Martínez había recibido una condena de más de 40 años de prisión, por lo que el Primer Tribunal Colegiado en Materia Penal de Toluca ordenó al juez que emita una nueva sentencia se base el Código Penal de Baja California vigente al momento de los hechos.
De acuerdo con los hechos ocurridos donde falleció Colosio, la versión oficial indica que Aburto disparó contra de Luis Donaldo Colosio, el 23 de marzo de 1994, en la colonia de Lomas Taurinas. Aburto Martínez fue juzgado por estos hechos dos días después, bajo el cargo de homicidio calificado con premeditación, ventaja y alevosía, además de la portación de arma de fuego sin licencia.
¿Quién es el asesino de Luis Donaldo Colosio?
La Fiscalía General de la República (FGR), a cargo del fiscal Alejandro Gertz Manero, presentó al presidente Andrés Manuel López Obrador una propuesta para reabrir el caso sobre el asesinato de Luis Donaldo Colosio Murrieta.
Ante los hechos, la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) publicó un informe elaborado con base en una carta de Mario Aburto, donde hizo mención al expresidente Carlos Salinas de Gortari y al exgobernador de Sonora, Manlio Fabio Beltrones.
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También modificó la primera declaración que hizo en Tijuana sobre los hechos, de acuerdo con una publicación del columnista Raymundo Riva Palacio, en abril pasado.
En octubre de 2021, la CNDH había pedido a la FGR que reabriera el caso por presuntos actos de tortura contra Mario Aburto.
La Comisión dijo que su investigación determinó que las autoridades incurrieron en actos de tortura, los cuales fueron ocultados por médicos. Además, se encontró que los custodios del centro de reclusión habían mantenido al acusado en cárceles lejanas al lugar donde habita su familia, lo cual es una violación a los derechos humanos.