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Así se forma un huracán

¿Cómo evoluciona una tormenta a huracán?¿Cuáles son sus categorías? ¿Son huracanes, ciclones o tifones? Respondemos todas tu preguntas sobre estos fenómenos naturales.

El Golfo de México y la zona del Caribe están sufriendo los estragos de dos huracanes, 'Katia' e 'Irma' y un tercero, 'José', se acerca rápidamente. Es importante conocer cómo nacen estos fenómenos y su evolución para evitar alarma o bien, tomar las precauciones pertinentes si vives en zona de riesgo.

Así que te daremos una guía rápida sobre estos impresionantes y poderosos fenómenos naturales.

¿Huracanes, ciclones o tifones?


Estas tormentas tienen distintos nombres como huracanes, tifones o ciclones según el lugar donde se producen.

El término científico para todas estas tormentas es ciclón tropical. Sólo los ciclones tropicales que se forman sobre el Océano Atlántico y el Océano Pacífico oriental se llaman huracanes, los que se forman en el Océano Índico son tifones.

Como sea que se les llamen, todos los ciclones tropicales se forman de la misma manera.

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Así nacen

Los ciclones tropicales son como motores gigantes que usan aire cálido y húmedo como combustible. Por eso se forman sólo sobre océanos de agua templada, cerca del ecuador, de acuerdo con la NASA.

El aire cálido y húmedo sobre los océanos se eleva desde cerca de la superficie. Como el aire se mueve hacia arriba y se aleja de la superficie, queda menos aire cerca de la superficie. Es decir, el aire cálido se eleva causando un área de menor presión de aire cerca del océano.

El aire con mayor presión de las áreas circundantes llena el área de baja presión. Luego, este 'nuevo' aire se torna cálido y húmedo y también se eleva. En la medida en que el aire cálido continúa subiendo, el aire circundante gira para ocupar su lugar.

Cuando el aire cálido y húmedo se eleva y se enfría, el agua en el aire forma nubes. Todo el sistema de nubes y aire gira y crece, alimentado por el calor del océano y el agua que se evapora de la superficie.


Las tormentas que se forman al norte del ecuador giran en sentido contrario a las manecillas del reloj. Las tormentas al sur del ecuador, giran en el sentido de las manecillas del reloj. Esta diferencia se debe a que la Tierra gira sobre su eje.

Al girar el sistema de tormenta cada vez más rápido, se forma un ojo en el centro. En el ojo todo es muy tranquilo y claro, con una presión de aire muy baja.

Este proceso puede tomar horas o días, dependiendo de las condiciones.

Las categorías

Los ciclones tropicales tienen cinco categorías, las cuales se establecen de acuerdo a tres factores: velocidad de sus vientos, el daño que por los mismos puede causar en tierra y la altura de sus olas, es decir, la marea de tormenta.



¿Quién les pone nombre y cómo los seleccionan?

Por siglos, muchos huracanes en las Antillas eran nombrados por el santo del día en que afectaba el huracán. El primer meteorólogo que utilizó un nombre propio (de mujer) fue el australiano Clement Wragge a finales del siglo 19 y principios del 20, de acuerdo con los datos históricos del Centro Nacional de Huracanes estadounidense.

En 1953, los Estados Unidos abandonaron, por confuso, el plan de nombrar las tormentas usando un alfabeto fonético (Able, Baker, Charlie) La Oficina Meteorológica de Estados Unidos usó únicamente nombres de mujeres.

En 1979 la Organización Meteorológica Mundial y el Servicio Meteorológico de Estados Unidos acordaron usar nombres alternos de hombres y mujeres. Ellos preparan cada año una lista potencial de nombres, usando uno por cada letra del alfabeto (las letras Q, U, X, Y, Z no se incluyen debido a que pocos nombres empiezan con esas letras). Estas listas son recicladas cada seis años.
 
Los nombres de huracanes muy destructivos se retiran, quedando en los registros históricos, y son sustituidos por otros que inician con la misma letra.

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Si vives en una zona de huracanes o bien, uno de estos ciclones ha provocado lluvias en zonas montañosas, es muy importante que atiendas el llamado de las autoridades.

Puedes monitorear estos fenómenos en el sitio del Servicio Meteorológico Nacional o bien, en el Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos. Es vital no prestar atención a rumores en redes sociales, confirma la información en fuentes oficiales para que tomes las medidas pertinentes.

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