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Decenas de miles de estudiantes universitarios están encerrados en sus campus en Dalian después de que la ciudad del noreste de China se convirtiera en el último foco de infecciones por COVID.
El impulso del brote actual se está desacelerando y la epidemia está generalmente “bajo control”, aseguró este domingo el gobierno de la ciudad de Dalian en una publicación de Weibo.
En Beijing, el gobierno local pidió a las personas que viajan a la capital china que presenten una prueba negativa de COVID dentro de las 48 horas posteriores a la entrada a la ciudad.
En otra parte, en la ciudad de Shangrao, el gobierno local emitió un comunicado en respuesta a una denuncia de una mujer que dijo que sospechaba que su perro había sido sacrificado en su casa mientras estaba en cuarentena de hotel. Los trabajadores que desinfectaban el área le habían dado al animal un “tratamiento no peligroso” sin informar al propietario y se habían disculpado, según el comunicado del gobierno.
La ciudad, en la provincia oriental de Jiangxi, informó de dos casos locales de COVID para el sábado, según un comunicado de las autoridades sanitarias locales.
La política ‘COVID Cero’
El zar de Covid de China enfatizó la necesidad de seguir sofocando agresivamente las infecciones domésticas por coronavirus para mantener a la segunda economía más grande del mundo intacta y la gente del país a salvo.
El país ha contenido efectivamente los casos comunitarios de COVID y ha logrado limitar las infecciones graves, dijo el sábado Liang Wannian, epidemiólogo que encabeza el equipo de expertos del gobierno en la prevención del coronavirus, citado por la agencia de noticias Xinhua en una entrevista.