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Una masacre se registró en el cementerio San Rafael, ubicado al sur de Ciudad Juárez, en Chihuahua, cuando integrantes de una familia fueron baleados mientras sepultaban a un pariente.
El ataque sorpresivo a la familia dejó cinco muertos y se desarrolló afuera del panteón después de sepultar a Bryan Uziel Muñoz, de 25 años, quien fue asesinado en la puerta de su casa en la colonia Granjas de Chapultepec, el 19 de septiembre.
Tres personas, de entre 20 y 30 años, fueron asesinadas en el interior de un automóvil Chrysler 300 color blanco, mientras que a los dos restantes intentaron brindarles atención médica, pero no lograron sobrevivir.
Según información de la Agencia Estatal de Investigación (AEI) de la Fiscalía Zona Norte, el saldo del ataque fue de cinco muertos y un lesionado.
Así ocurrió la balacera en el panteón San Rafael
La Fiscalía Zona Norte reportó que las víctimas salían del funeral dentro del cementerio San Rafael cuando fueron agredidos con disparos de armas largas.
A bordo del automóvil quedaron los cuerpos sin vida de dos hombres y una mujer, mientras que otros tres lesionados fueron llevados a hospitales, muriendo uno en el trayecto y otro al llegar al Hospital del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), Unidad 35.
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El lesionado se mantiene bajo observación médica en otra clínica de la zona. Con los 5 muertos en esta masacre, aumentó a 67 la cifra de homicidios dolosos en esta frontera, según datos de la propia autoridad estatal.
Elementos del Servicio Médico Forense estuvieron a cargo de recoger y trasladar los cuerpos para realizar la necropsia de ley y la identificación de todas las personas que murieron durante la balacera.
El área se mantuvo asegurada para que elementos de la Fiscalía de Chihuahua realizaran las investigaciones correspondientes.