La cultura despierta tras una pausa a causa de la pandemia de Covid-19 para reencontrarse con los viajeros internacionales que, a partir de abril, pudieron regresar a Toronto y todos los destinos de Canadá luego de relajar las medidas sanitarias.
Las luces se encienden, los engranajes giran y las puertas de los museos se abren para que las exposiciones cobren vida cuando un visitante pose su mirada en las distintas piezas que resistieron el paso del tiempo.
Estos dos años de pandemia dejaron nuevas atracciones y experiencias que prometen dejar sin aliento con un paseo por las alturas o a través de las miniaturas más emblemáticas del país de la hoja de maple.
ROMper la historia
El Royal Ontario Museum (ROM) es la colección de cultura mundial e historia natural más grande de Canadá y el quinto museo más grande de América del Norte que este 2022 cuenta con dos exposiciones que desafían los límites de la ficción y la realidad.
Grandes Ballenas (Great Whales) es la nueva exhibición del museo dedicado por completo a los cetáceos, que parte del misterio que envuelve a estos animales, pues los científicos no conocen muchos detalle sobre sus vidas, pero descubrieron que su comportamiento está relacionado con el cambio climático, por lo que puede ser una guía para combatirlo.
En la sala se pueden observar esqueletos completos de ballenas azules y cachalotes, así como sus corazones junto a otros especímenes marinos como cucarachas y arañas de mar, cangrejos gigantes, estrellas de mar y pulpos que se hallaron devorando un cadáver de ballena.
Para los amantes de Harry Potter, se incluyó una sala dedicada a los animales reales y mitológicos que inspiraron la película Animales Fantásticos y dónde encontrarlos, donde se exponen algunos de los vestuarios que se usaron en el rodaje del filme, acompañado de muebles que se mueven como por arte de magia y ambientación musical de la saga.
Los visitantes pueden aprender por medio de fragmentos de la película, música y diferentes artículos como esqueletos el origen mitológico de algunas de estas criaturas como las ninfas, los unicornios, los basiliscos y hasta dragones, incluyendo las que se “inventaron” para esta serie de cintas.

Canadá en escalas
Little Canada es una de las nuevas atracciones de Toronto para los amantes de la cultura, los destinos y las maquetas que hará recordar a muchos el paso por la escuela y las ocasiones en que se olvidaban proyectos de este tipo o la cartulina.
Esta actividad se localiza en el corazón de la ciudad, en una de las zonas más importantes, sobre Dundas Street, junto al centro comercial más importante llamado Eaton Centre. Cuenta con tres niveles llenos de canadienses en miniatura y monumentos y edificios que te harán sentir como un gigante.
Las maquetas cuentan con videos, música, sonidos ambiente y con objetos que se mueven todo el día como luces, autos, barcos, personas y pantallas que te harán sentir como un espectador colosal mientras recorres las distintas salas que se dividen en el Pequeño Toronto, Petite Quebec, Vancouver, las Cataratas del Niágara y otros destinos que se construyen pieza por pieza hechas a mano por los colaboradores del proyecto.
Si quieres formar parte de los pequeños canadienses y sufrir una miniaturización, la atracción cuenta con una cabina semicircular llena de luces y cámaras que “escanean” tu cuerpo para poder realizar una figura en 3D de ti y tus familiares, que te entregarán por un costo extra y se añadirá a la colección de Little Canada.
El arte de lo cotidiano
The Art Gallery of Ontario (AGO) nos da una muestra de que el día a día también se puede volver arte con la exposición temporal “Estoy aquí” que recaba un sinfín de películas caseras filmadas por familias canadienses que se perdieron con el paso del tiempo y se recuperaron para conectar fragmentos de un país y su estilo de vida hace décadas.
Además, dedicaron una exhibición al arte hecho por la comunidad LGBTQ+ con “Blurred Boundaries: Queer Visions in Canada” aunado a sus muestras permanentes a lo largo y ancho de sus tres pisos con piezas que brindan recorridos por la época de la colonia española y el arte sacro que influenció a países de Latinoamérica como México, Perú y Colombia.
Desde las alturas
Sin duda, uno de los principales atractivos de Toronto es la CN Tower, que se ubica entre el estadio de baseball de los Azulejos (Blue Jays) y el acuario de Ripley. La torre es famosa por su mirador con vista de 360 grados de la ciudad, desde donde se pueden ver la antigua y la moderna ciudad de Toronto, el mar y su isla.
Pero más allá de su mirador, una de las experiencias que los turistas y locales buscan, es caminar desde las alturas a casi 400 metros de elevación para suspenderse de espaldas entre las nubes y rascacielos canadienses.
Se trata del Edge Walk, un paseo de aproximadamente 15 minutos donde se camina por una cornisa de metal de apenas 1.5 metros de ancho que rodea la CN Tower, donde los más valientes ponen a prueba su temple.
Es importante reservar con anticipación tu lugar, pues los grupos son de máximo seis personas en horarios específicos, pues cada hora se preparan los intrépidos con arneses y trajes naranjas para subir al Edge Walk. Las cámaras, celulares y prendas como relojes y pulseras están prohibidos, pero no hay de qué preocuparse, pues hay paquetes que incluyen fotografías en alta calidad y hasta un video de toda la odisea en las alturas.
El grupo siempre va acompañado por una guía que explica cómo realizar los movimientos para colocarse al borde de la cornisa y sentir la adrenalina a tope con el aire en el rostro y ver como en Little Canada los edificios que están debajo.
La seguridad está cuidada minuciosamente y los equipos que se utilizan para proteger a los valientes están en perfectas condiciones, por lo que no hay ningún riesgo al realizar este paseo por el cielo.



