¿Y este vientecito? Son los muertos que ya se acercan... Con la llegada de octubre un boom de platillos y postres ‘terroríficos’ se instalan en los menús de cafeterías y restaurantes.

El mood dark no tarda en manifestarse, así que para inaugurar los primeros tenores de Halloween y Día de Muertos emprendimos la búsqueda de algunos sabores e ingredientes de la temporada, como el azahar, la flor de cempasúchil (sí, también se come y se bebe), el totomoxtle y la calabaza.

En la Ciudad de México y zona metropolitana se abre toda una posibilidad gastronómica con el tema spooky, pero para hacerte más amable la búsqueda elegimos los postres que no puedes dejar de probar, ¡ya están disponibles!

Pan de ceniza de totomoxtle

El pan de muerto por pura existencia ya es rico, pero esta especialidad de Café Xolo, una cafetería en el centro de Texcoco, Estado de México, parece que se ha llevado las palmas en innovación culinaria.

Para su preparación, se tuesta el totomoxtle, es decir las hojas secas que envuelven la mazorca del maíz. Una vez que ha llegado a su punto perfecto se muele en metate para cubrir toda la pieza de pan con esta magia proveniente de la milpa.

Pero espera, esto solo es el principio pues el pan está relleno de un delicioso dulce de camote, cuyas notas dulces terminan de darle el toque a la primer probadita.

Te recomendamos acompañarlo con un buen cacao chiapaneco o una especialidad de café de la casa.

Dónde: Avenida Juárez Sur #206, colonia Centro, Texcoco

Churros negros

La Churrería El Moro convierte su mayor especialidad en una experiencia única. Por tiempo limitado ya puedes disfrutar los churros de ‘muerto’, elaborados con esencia de azahar, flor de naranja y la receta secreta de pan de muerto pero en formato churro tradicional.

Además, se suman a su menú los consuelos de calabaza con cempasúchil, que también encontrarás en malteada.

Dónde: Consulta la sucursal más cercana

Cráneo Reanimeitor

Una atmósfera gótica inspirada en la obra del escritor H. P. Lovecraft envuelve a los visitantes desde el primer momento. Las luces, la decoración, la música y la comida transportan a dimensiones que apenas se vislumbran en la imaginación.

El menú es un portal a tierras desconocidas, así que valentía al momento de elegir. Te recomendamos comenzar con este cráneo de chocolate amargo servido sobre un espejo de frutos rojos.

Agrega a tu travesía un mousse de calabaza con mantequilla relleno de ponche de frutas, es de temporada así que aplícate porque se acaba.

Dónde: Lorenzo Boturini #527, colonia El Parque, CDMX

Cake Jar Pumpkin spice

Las ‘cocinas fantasma’ (restaurantes sin sede física, pero con servicio a domicilio) acapararon la atención de miles de comensales.

La pandemia fue el mayor catalizador para este fenómeno creciera a pasos agigantados y se convirtiera en la fuente de ingresos para decenas de familias.

Así le sucedió a Cuarentena Baking, cuyo proyecto consiste en ofrecer postres fuera de serie: galletas y pasteles de lotus y caramelos deliciosos, todo muy ‘atascado’.

Por la temporada han lanzado una opción muy especial: un cake jar de dulce de calabaza.

En su página oficial puedes solicitar tus pedidos o visitar su taller los sábados de 13:00 a 19:00 h. Si te vas a lanzar, te recomendamos mucha paciencia porque las filas de espera son bastante largas.

Dónde: Puebla #57, colonia Roma Norte, CDMX (solo los sábados)

Pan de cempasúchil

Cuando hablamos de panes de muerto no se escatima en combinaciones de ingredientes. En Testal, un restaurante de comida mexicana, encontrarás un verdadero tesoro de la repostería.

Se trata del pan de muerto relleno de dulce de calabaza. El sabor es sublime pero lo que eleva corazón y espíritu es la cremosa consistencia del relleno.

Puedes acudir directamente a la sucursal u ordenarlo en por mensaje directo en sus redes sociales.

Dónde: Dolores #16, colonia Centro, CDMX

Malteadas del aquelarre

Si te gusta el tarot, la quiromancia, las runas y todo tipo de temas esotéricos, Salem Witch Coffee es para ti. Los tonos púrpura, la atmósfera pagana de sus decorados y la música ‘underground’ que recuerda a los pubs irlandeses lo hacen un lugar único.

El menú se asemeja a un curioso libro pop up, en el que ilustraciones y figuras se presentan ante ti conforme vas recorriendo las páginas.

Cada platillo tiene un nombre que remite a algo terrorífico: momias, vampiros, brujas, duendes, etcétera.

Algunos sabores de bebidas van cambiando por temporada o mes, así que aprovecha las semanas previas a Halloween para descubrir qué pócima misteriosa será tu próxima bebida.