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De manera conjunta, los y las presidentes municipales de los ayuntamientos de Atizapán de Zaragoza, Cuautiltán Izcalli, Naucalpan y Tlalnepantla, llevaron a cabo una conferencia de prensa para exigir a los gobiernos estatal y federal que definan el límite del caudal que la Conagua establecerá para el abastecimiento de agua potable.
Esta situación, dijeron, se debe a las difíciles condiciones en que se encuentra actualmente el Sistema Cutzamala, que al cierre de año está en niveles bajos.
Los alcaldes que formaron un frente común reclamaron con firmeza, pues están conscientes que anualmente la Comisión Nacional del Agua reduce los litros de agua potable para el abastecimiento de cada municipio.
No obstante, las autoridades municipales consideran que este año el recorte del abastecimiento podría ser mayor, pues ha sido el más caluroso del que haya registro y el Sistema Cutzamala no cuenta con la misma cantidad de agua.
“Pedimos a los Gobiernos Estatal y Federal y en este caso también a la Conagua que nos diga antes del 15 de diciembre de cuánto será la reducción para este año, porque siempre lo hace pero no nos avisa y nosotros nos vamos dando cuenta hasta el día último del año”, dijo Pedro Rodríguez, edil de Atizapán de Zaragoza.
El alcalde dijo que una de las dificultades que se ha presentado es la poca comunicación con las administraciones federal y estatal, lo cual ha impedido que no haya una estrategia clara para ayudar a mitigar el problema de la escasez de agua, lo cual ha derivado en bloqueos ciudadanos de calles.
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Pedro Rodríguez pidió a la Conagua que entregue los recursos del fideicomiso 1928, que señala que en situaciones de emergencia hídrica se puede utilizar para que el derecho humano de acceso al agua quede cubierto para los ciudadanos.
“Si son claros con estos términos nosotros podríamos hacer maravillas para entregar un abasto de calidad a los ciudadanos y hacer una estrategia. Están tardando mucho estas autorizaciones para crear nuevos pozos o incluso las están negando”, expresó.
En común acuerdo, los alcaldes comentaron que, pese a la reducción de agua, ellos no pueden dejar de cobrar el servicio para los ciudadanos, pues van a procurar mantenerlos con el abastecimiento de agua.