Del total de la población ocupada, 41 por ciento se encuentra en situación de pobreza laboral, es decir, les resulta imposible adquirir la canasta básica alimentaria con el ingreso que perciben.
Lo anterior se dio a conocer en la presentación del documento ¿Cómo reducir la pobreza en México?, en el marco del Reporte de Economías Estatales del segundo trimestre de 2015, a cargo del instituto México ¿cómo vamos?
En el evento, Viridiana Ríos, directora del observatorio económico, advirtió que la clave para reducir la pobreza en el país resulta vital la reducción de la informalidad laboral.
No existe, dijo, una relación fuerte entre la reducción de la pobreza y el crecimiento económico. No obstante, sí existe una relación significativa entre la reducción de la pobreza y la reducción de la informalidad.
Ríos destacó en conferencia de prensa que los empleos necesarios para cada entidad, dependerá de cuanta sea la Población Económicamente Activa (PEA) y de cuantos jóvenes existan en el estado, ya que la intención, señaló, es generar empleo para todos los jóvenes que se van integrando a la fuerza productiva.
La meta nacional, de acuerdo con datos del instituto es generar 1.2 millones de empleos cada año, repartidos proporcionalmente con la PEA de cada entidad.
Por ejemplo, el Estado de México y el Distrito Federal enfrentan los mayores retos en este aspecto, ya que la meta anual de generación de empleo para estos estados es de 166 mil 600 plazas, en el caso del Estado de México y de 102 mil 200 empleos en la capital del país.
Empero, otras entidades como Jalisco y Veracruz también se encuentran con importantes metas, ya que la generación de empleo anual en estas entidades supera los 81 mil empleos en Jalisco y los 74 mil en Veracruz.
Los estados que lograron cubrir el 100 por ciento de los empleos necesarios durante el tercer trimestre de 2015 fueron Baja California, Sinaloa, Chihuahua, Coahuila, Nuevo León, San Luis Potosí, Aguascalientes, Jalisco, Querétaro, el Distrito Federal y Tlaxcala.
Por su parte, Tamaulipas, Guanajuato y Quintana Roo cubrieron en aproximadamente 75 por ciento las plazas laborales necesarias. Mientras que el resto de las entidades de la república no alcanzaron a generar más de 75 por ciento de los empleos demandados por la población.