El cineasta David Lynch es uno de los directores más importantes de finales del siglo XX y parte del 'nuevo milenio'. Con filmes como El hombre elefante (Reino Unido-Estados Unidos, 1980), ha cautivado a los amantes del 'séptimo arte', pero ¿qué hay detrás de su trabajo?
"El potencial de la conciencia de cada ser humano es diferente. Cada uno de nosotros tenemos un océano en nuestra conciencia. Ese océano está lleno de inteligencia, de creatividad, de felicidad, de amor, de energía, de paz. Ahí está todo. Hay técnicas, como la meditación transcendental que abre la puerta a ese océano, a ese tesoro", dijo el sábado en la videoconferencia El cerebro creativo de David Lynch, transmitida en la sala Carlos Chávez, de la UNAM.
Lynch explicó que, durante un largo periodo de su vida, sufrió ansiedad y sentía ira. Al realizar las técnicas de meditación transcendental, descubrió que era más feliz y, sobre todo, logró expandir su nivel de creatividad.
😍🎥 Y con ustedes, uno de los directores de cine más influyentes de nuestros tiempos: David Lynch en videoconferencia para #FestivalElAleph.😛 pic.twitter.com/fMiEw9bCJm
— CulturaUNAM (@CulturaUNAM) June 2, 2018
"En mi experiencia, antes de comenzar a crear, tenía mucha ansiedad, depresión, enojo por las situaciones en mi vida y sufrimiento. Comencé a practicar meditación trascendental y a las dos semanas, la ira desapareció. Empecé a mejorar. Empecé a ser feliz y comencé a tener más ideas creativas. La negatividad es la enemiga de la creatividad, impide que las ideas fluyan", aseguró.
El también realizador de Twin Peaks (Estados Unidos, 1990) puntualizó en la conferencia moderada por José Gordon, que el estrés, el odio y la ira que prevalecen actualmente en el mundo impiden que la creatividad se expanda ya que estos sentimientos "son como la oscuridad: no ves nada y representa la ausencia de todo".
En la breve charla, Lynch reconoció que en sus filmes prevalecen los elementos negativos, pero destacó que en ellos trata de poner gran énfasis en la esperanza y los aspectos positivos de los personajes.
La idea, ese gran pez dorado
¿Qué pasa cuando queremos escribir o planear algo y simplemente no estamos inspirados? Lynch dio la respuesta a los asistentes a la conferencia, la cual forma parte del festival El Aleph, realizado por la máxima casa de estudios: atrápala como si fuese un gran pez.
"Tú puedes tener un sonido, imágenes en movimientos. Puedes escuchar a la gente y cómo se mueve (…) Cuando tienes una idea, la ves, la sientes, la oyes y viene con mucha información, es mágica. Son como los peces, como un bello pez dorado y ella atraerá otras ideas", comentó.
El también productor musical detalló que para que ese 'pez dorado' atraiga a otros, es importante centrarse en él. "Hay que traer la información del subconsciente al consciente, así tendrás más información flotando. Al tener una gran idea y que ella atraiga otras, puedes expresarlas de diversas formas o movimientos", expuso.
Lynch mencionó que para ser creativo, no es necesario sufrir, mucho menos durante la realización de las piezas artística, sin importar sobre qué sean. "La gente no tiene que sufrir, debe disfrutar la vida. (Vincent) Van Gogh es el ejemplo perfecto: él no sufría durante el proceso creativo; su mente trabajaba de un modo distinto", comentó.