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Macri pone fina al control kirchnerista de los medios de comunicación

El presidente de Argentina desplazó desplazó a los titulares de los organismos de medios, Martín Sabbatella y Norberto Berner, los únicos funcionarios que no habían renunciado después de que Cristina Fernández de Kirchner dejara la presidencia.

BUENOS AIRES.- El presidente de Argentina, Mauricio Macri, decretó la intervención de la Autoridad Federal de Servicios de Comunicación Audiovisual (AFSCA) y la Autoridad Federal de Tecnologías de la Información (Aftic) y desplazó a sus titulares, los kirchneristas Martín Sabbatella y Norberto Berner, los únicos funcionarios que se habían resistido a renunciar después de que el pasado 10 de diciembre la presidenta Cristina Fernández de Kirchner dejara su cargo.

Tanto Sabbatella como Berner tenían mandato por ley hasta 2017, pero en una conferencia de prensa el ministro de Telecomunicaciones, Oscar Aguad, aseguró que ambos organismos y sus autoridades ya no responden a la nueva estructura orgánica de la Ley de Ministerios.

"Existe una rebeldía de las autoridades por lo que esta intervención se justifica o de lo contrario estaremos en caos", señaló Aguad quien tildó de "militante político" al titular de la AFSCA, Martín Sabbatella, y lo acusó de haber "utilizado la ley de medios audiovisuales para atacar a ciertos medios y beneficiar a otros".

Además, aseguró que "la ley de medios --impulsada por Cristina hace seis años-- por ahora no se toca", aunque dejó abierta la puerta a una revisión futura.

Sabbatella consideró que la intervención "es un atropello" y "una violación de la ley" ante lo que presentó un hábeas corpus y un recurso de amparo con medida cautelar.

La ley establece límites a la cantidad de emisoras de radio, canales de televisión y operadores de pago que puede acumular un mismo grupo.

El decreto de Macri pospone la intervención de los dos entes por medio año. En ese periodo, la coalición del presidente, Cambiemos, espera modificar las leyes de medios audiovisuales y de telecomunicaciones para unificar el organismo de control, aunque la iniciativa precisa de una amplia maniobra en el Parlamento.

El presidente no solo tendrá que pactar con los peronistas antikirchneristas y los progresistas en la Cámara de Diputados, sino que necesitará de algunos de los kirchneristas en el Senado.

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