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El gobierno, en conjunto con las tres principales líneas aéreas: Volaris, Viva Aerobus y Aeroméxico, activó desde el viernes un puente aéreo para trasladar a personas que han quedado atrapadas en Acapulco después del devastador paso de ‘Otis’, el huracán categoría 5 que destruyó el puerto turístico.
Como parte de ello, las líneas aéreas han presupuestado un mínimo de 40 vuelos para rescatar a unos tres y 5 mil personas, refirió en entrevista para El Financiero, el subsecretario de Transportes, Rogelio Jiménez Pons.
Las aerolíneas han cooperado con el gobierno para mantener el puente aéreo durante los siguiente días. El acuerdo es que, de ser necesario, las empresas aéreas puedan enviar más aeronaves.
“Si hay más demanda, las tres aerolíneas nos han expresado que van a mandar más. Lo único que estamos haciendo es no cobrarles el combustible, todo es gratis, es humanitario”, detalló el funcionario federal en entrevista.
Las aerolíneas iniciaron vuelos desde la Ciudad México el viernes, llevando a la zona médicos, alimentos y funcionarios al tiempo que traían pasajeros de vuelta, dijo en entrevista telefónica Ricardo Dueñas, director ejecutivo de Grupo Aeroportuario del Centro Norte SAB (OMA). Los vuelos continuarán durante el transcurso del día, pero están restringidos a las horas de luz debido a daños en la torre de control del aeropuerto, añadió.
“El primer paso es sacar a salvo a todos los pasajeros que lo requieran. Una vez terminado, nos vamos a abocar a reestablecer las operaciones de forma normal para posteriormente abocarnos también a la reconstrucción y restauración de la terminal”, dijo.
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Es demasiado pronto para predecir cuándo se podrán reanudar las operaciones comerciales, añadió Dueñas.
Aeroméxico dijo a El Financiero que, hacía las 13:00 del viernes, se habían realizado un par de vuelos redondos hacia y desde el aeropuerto de Acapulco, esto como parte del puente aéreo organizado por el gobierno federal y las líneas aéreas para realizar labores de rescate.
El sábado se hicieron tres (vuelos redondos) e igualmente el domingo serán tres redondos.
Viva Aerobus informó a El Financiero que los vuelos entre el viernes y el domingo ascenderían a 24 y, algunos, no solo irían hacia el AICM, sino también al AIFA y al de Monterrey.
Volaris dijo a El Financiero que “la mañana (del viernes) aterrizó en el aeropuerto de Acapulco nuestro primer vuelo para apoyar en todo lo que podamos”.
Al cierre del viernes, el gobierno reportó 14 vuelos humanitarios, en los que se trasladaron insumos, personal médico y grupos de turistas que, poco a poco, han podido llegar al aeropuerto para salir.
El puente aéreo no ha operado con facilidad: los primeros vuelos en Acapulco regresaron a la Ciudad de México con pocos pasajeros, reveló a El Financiero el subsecretario de Transportes, Rogelio Jiménez Pons.
En entrevista, el funcionario detalló que los turistas han tenido dificultades no solo para llegar al aeropuerto de Acapulco, sino que muchos de ellos no están enterados de los vuelos debido a las fallas en las telecomunicaciones y la intermitencia de la energía eléctrica tras el paso del huracán ‘Otis’, que destruyó la ciudad portuaria.
“Los primeros vuelos regresaron con poca gente porque no hay difusión”, advirtió el funcionario federal.
El gobierno trasladó, en el primer vuelo, a cerca de 58 médicos mexicanos, además de cuatro médicos cubanos que se “colaron” en las labores de rescate, esto de acuerdo con Jiménez Pons.
Además, las autoridades han dispuesto dos puntos de reunión para los traslados a los aeropuertos: el primero se localiza en la Glorieta de La Diana, ubicada en la costera Miguel Alemán s/n, Fraccionamiento Magallanes, en la Condesa; y el segundo en el hotel Vidanta, en la Costera de las Palmas, no.1121 en el Fraccionamiento Playa Diamante.
El mayor número de viajeros y personas que deseen salir de Acapulco se realizará de forma terrestre. Para ello, la Cámara Nacional de Autotransporte de Pasaje y Turismo (CANAPAT) ha colaborado con 200 autobuses para el traslado de personas hacia la CDMX.
Con daños serios
Aunque las autoridades han podido remediar algunos daños en la torre de control del aeropuerto de Acapulco, las condiciones climáticas y las interrupciones del sistema de energía eléctrica complican las operaciones aéreas en esa zona.
“Se opera en condiciones difíciles por la temperatura, humedad y restricciones de energía. Se restablecieron las operaciones visuales, con toda seguridad, operando con radios de emergencia”, detalló para El Financiero, el secretario general del Sindicato Nacional de Controladores de Tráfico Aéreo (Sinacta), José Alfredo Covarrubias.