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¿El COVID es natural o un accidente de laboratorio? Relación EU-China se ‘calienta’

La política de Estados Unidos hacia China ahora operará bajo un ‘nuevo conjunto de parámetros estratégicos’, dijo el coordinador de los Estados Unidos para asuntos del Indo-Pacífico.

En medio de tensiones crecientes con China, el Gobierno de Joe Biden anunció este miércoles que las agencias de inteligencia de Estados Unidos realizarán una investigación para aclarar de una vez por todas el origen del SARS-CoV-2.

La nación norteamericana está entrando en un período de intensa competencia con el gigante asiático a medida que el gobierno que dirige la segunda economía más grande del mundo se vuelve cada vez más controlado por el presidente Xi Jinping, dijo este miércoles el máximo funcionario de la Casa Blanca para Asia.

“El período que se describió ampliamente como compromiso ha llegado a su fin”, dijo Kurt Campbell, coordinador de los Estados Unidos para asuntos del Indo-Pacífico en el Consejo de Seguridad Nacional, en un evento organizado por la Universidad de Stanford.

La política de Estados Unidos hacia China ahora operará bajo un “nuevo conjunto de parámetros estratégicos”, dijo Campbell, y agregó que “el paradigma dominante será la competencia”.

Las políticas chinas bajo Xi son en gran parte responsables del cambio en la política estadounidense, dijo Campbell, citando enfrentamientos militares en la frontera de China con India, una “campaña económica” contra Australia y el surgimiento de la diplomacia del “guerrero lobo” de China.

El comportamiento de Beijing fue emblemático de un cambio hacia un “poder severo, o poder duro”, lo que “indica que China está decidida a desempeñar un papel más asertivo”, manifestó.

Los comentarios contundentes de Campbell se produjeron cuando el presidente Joe Biden dijo que ordenó a las agencias de inteligencia de Estados Unidos que “redoblaran” sus esfuerzos para determinar de dónde vino el COVID-19, después de evaluaciones contradictorias de si sus orígenes son naturales o de un accidente de laboratorio en China.

La medida seguramente enojará a los funcionarios en Beijing, quienes han rechazado repetidamente cualquier sugerencia de que el virus escapó de un laboratorio en la ciudad de Wuhan. Biden dijo en un comunicado este miércoles que los funcionarios chinos deben ser más transparentes y alentó a Beijing a unirse a una “investigación internacional basada en pruebas y a brindar acceso a todos los datos y pruebas relevantes”.

Los orígenes del virus son solo una parte de una relación polémica y compleja entre Estados Unidos y China. Eso incluye disputas sobre los reclamos de Beijing sobre el Mar de China Meridional, los derechos humanos en la región de Xinjiang, el futuro de Taiwán y Hong Kong y preocupaciones económicas, incluido el despliegue de tecnología 5G y una escasez global de semiconductores.

Funcionarios chinos y estadounidenses han dicho que ven áreas de cooperación mutua, particularmente sobre el cambio climático, pero en muchos otros temas la relación es mucho más fría.

Campbell sabe bien lo que es negociar con diplomáticos chinos enojados. En marzo, fue uno de los funcionarios estadounidenses que se reunieron con sus homólogos chinos en Alaska en conversaciones que tuvieron un comienzo difícil con discusiones ante reporteros y cámaras sobre derechos humanos, comercio y alianzas internacionales.

Xi Jinping, ‘poco sentimental’

El presidente Xi, dijo Campbell, está en el corazón del nuevo enfoque de las relaciones entre Estados Unidos y China. Describió a Xi como “profundamente ideológico pero también bastante poco sentimental”, y agregó que el líder chino “no está muy interesado en la economía”.

Desde que llegó al poder en 2012, Xi ha “desmontado casi por completo casi 40 años de mecanismos diseñados para el liderazgo colectivo”, dijo Campbell, y agregó que los principales diplomáticos chinos como el miembro del Politburó Yang Jiechi, el ministro de Relaciones Exteriores Wang Yi y los altos funcionarios enviados a las conversaciones en Alaska no están “ni cerca, sino a cien millas” del círculo íntimo del líder chino.

Los aliados serán fundamentales para los esfuerzos de Estados Unidos para hacer retroceder a China en los próximos años, dijo Campbell.

Estados Unidos ya ha tratado de aumentar la importancia de su trabajo dentro del llamado grupo de naciones Quad, que incluye a India, Japón y Australia. Y las primeras reuniones de Biden en la Casa Blanca con jefes de estado extranjeros fueron con Yoshihide Suga de Japón y Moon Jae-in de Corea del Sur.

“Creemos que la mejor manera de involucrar a una China más asertiva es trabajar con aliados, socios y amigos”, dijo Campbell, y agregó que “la mejor política de China es realmente una buena política de Asia”.

Aún así, expuso que Estados Unidos tendrá que disipar los temores del declive estadounidense en Asia y ofrecer una “visión económica positiva” para la región.

“Por primera vez, realmente, ahora estamos cambiando nuestro enfoque estratégico, nuestros intereses económicos y nuestro poder militar más hacia el Indo-Pacífico”, aclaró Campbell.

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