Sobremesa

Nueva forma de comprar votos en la CDMX

En la Asamblea de la CDMX entre los pendientes hay una iniciativa de Morena para regalarles la calle y las banquetas a los comerciantes, léase a los informales.

Seguro no me lo van a creer, pero en la Asamblea de la CDMX entre los pendientes hay una iniciativa de Morena –redoble de tambores– para regalarles la calle y las banquetas a los comerciantes, léase a los informales, o como ellos les llaman los no asalariados. Esto ocurre después de habérselas dado a los restauranteros. El negrito en el arroz de esta superideota es que la regenta Sheinbaum, junto con Suárez del Real (exsecretario de Gobierno) y el aún secretario de Desarrollo Económico de la ciudad, Fadlala Akabani, harían a los informales, formales por una módica cuota, matando víbora en viernes, pues no sólo eliminarían a los intermediarios, o sea a líderes de los ambulantes, sino afiliarían más fieles a sus huestes.

¡Una vez más, lucrando con la tragedia y regalando lo que no es de ellos!

O cómo olvidar que, ante la falta de sensibilidad del gobierno de la 4T a principios de año, los restauranteros hicieron en su gremio un llamado a la desobediencia de #AbrimosOMorimos; acto seguido, las autoridades le pidieron a la industria “no politizar” y ofrecieron instalar una mesa de trabajo para llegar a acuerdos que le permitan a la CDMX no sólo cuidar la salud de los ciudadanos, sino, al mismo tiempo, buscar la mejor forma y más segura para abrir la economía. Sin embargo, su clientela electoral podía estar a sus anchas, pues para este gobierno, lo dijeron en una reunión en Zoom, los informales, como son pobres, pueden hacer lo que quieran, y jamás los obligarían a cerrar como a los restauranteros. Sin embargo, ¿los meseros, galopinas, pinches, chefs, lavalozas, etcétera, son ricos? No, señores, son empleados, son asalariados.

La situación era alarmante ya que ocho de cada 10 restaurantes estaban en riego de cerrar, como sucedió en 122 mil establecimientos como el Churchill’s, la Tortería de don Armando, el Café la Pagoda y el restaurante Arroyo.

Fumaron la pipa de la paz

Al crear el programa de Ciudad al Aire Libre, se permitió a los restaurantes ampliar sus espacios exteriores y comenzar una ruta para su recuperación.

En paralelo, el gobierno de la ciudad, con grupos políticos cercanos, comenzó a trabajar en una iniciativa de ley que permitiría formalizar el comercio informal de la CDMX, eliminando a los líderes y construyendo lazos directos con grupos políticos desde la Secretaría de Gobierno de la ciudad.

Obvio, dicha iniciativa de ley se esconde detrás de un discurso de generar incentivos para incorporar a los informales, buscando que se regularicen y que inicien una ruta que empareje el terreno con la economía formal. ¡Politiquería pura!

¡Aguas!, diputados de la alianza UnaCDMX del PAN, PRI y PRD.

Ah, y no debemos perder de vista al Verde, de Chucho Sesma, eh, que será el fiel de la balanza en la Asamblea.

De hecho, querían votarla antes de las elecciones, pero no hubo condiciones, tras el accidente en la Línea 12 del Metro, el cual cambió la lógica de la ciudad.

Y doña regenta cambió su agenda

De ser del pueblo ha pasado a quererse aliar, o al menos congraciarse con la clase media. ¡Dios guarde la hora, podrían decir en Palacio Nacional! ¿Cómo anda de manita sudada con los clasemedieros? Si son esos “aspiracionistas, egoístas, discriminadores”, etcétera, etcétera. Pero justo esta clase media es la que la sacó de su zona de confort, pero ojo, porque el pueblo es sabio y se dará cuenta y ni aquí ni en el cielo o el infierno, uno no puede quedar bien con Dios y con el Diablo.

Pues entregar a privados, particulares y a un gran grupo clientelar del pueblo bueno y sabio no asalariado bienes públicos para fortalecer alianzas y construir una base electoral para 2024, no sólo es incorrecto, sino que, en un escenario de pandemia, de crisis económica y con el gran desempleo que tenemos, es usar los bienes de todos los ciudadanos para comprar voluntades, abusando de sus necesidades que son producto de un acontecimiento mundial y de la ineptitud de un gobierno federal y estatal mediocres y obsesionados con su 4T y hasta... ¡podría llamarse corrupción!

Pues hay que reconocerle al Presidente que logró magistralmente que el pueblo no lo juzgue por su falta de empatía y las nulas políticas públicas para ayudarlo a salir más fácil, convirtiéndose, bueno… siempre ha sido un tecnócrata en toda la extensión de la palabra.

Con el puesto viene la responsabilidad

Para nadie es un secreto que ayudé a esta industria a poder abrir a principios de año, sin embargo, muchos no cumplen con el reglamento y no puedo convertirme en cómplice, pues todos vamos en el mismo barco. Canirac, ahora que es juez y parte, debe hacer cumplir las reglas; Germán González, es tu responsabilidad como cabeza del gremio que nadie se pase de listo.

Por ejemplo, el restaurante Pardo, disfrazado de pescadería, ya se apropió de la calle y hasta estructura metálica puso. Como de Víctor Romo ya no hemos visto ni sus luces, supongo que contó con el visto bueno de Gustavo García, director jurídico de la alcaldía Miguel Hidalgo. Otro ejemplo, el Maison Kaiser de Polanco ni de cerca cumple con las reglas de aforo en la calle. Por cierto, me enteré que Mauricio Tabe anda muy trabajador y viendo este tema, a pesar de que, como ya sabemos, por capricho de la regenta no hay entrega-recepción de las alcaldías hasta el 1 de septiembre.

Por cierto, ¿hoy de qué color es el semáforo, ah no, perdón... la alerta sanitaria para transitar hacia un 24 más moreno en la CDMX?

Saciamorbos…

¿La jefa de Gobierno confía lo suficiente en su nuevo y flamante secretario de Gobierno, Martí Batres?

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