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Sam Bankman-Fried, fundador de FTX, enfrentaría una sentencia de hasta 115 años de prisión si es culpable de los ocho cargos presentados el martes por el Departamento de Justicia de Estados Unidos, aunque es poco probable que sea sentenciado a un período tan largo.
El empresario señaló que lucharía contra la extradición a Estados Unidos, luego de que fuera detenido en Nassau, Bahamas.
Los fiscales federales se movieron a toda velocidad para acusar a Bankman-Fried, desafiando las expectativas de que un caso penal sobre el colapso del intercambio de criptomonedas tardaría meses o incluso años en llevarse a cabo. Los cargos en su contra incluyen fraude electrónico y conspiración para cometer fraude de valores.
Binance, la plataforma de intercambio de criptomonedas más grande del mundo, buscó contrarrestar las preocupaciones sobre las salidas de capital al reiterar su posición de que los activos de los usuarios están respaldados por reservas.
Bancarrota de FTX: se enfrentan funcionarios de EU y Bahamas
Los liquidadores de las Bahamas están listos para pelear con los abogados de bancarrotas de EU por los restos del criptoimperio de Sam Bankman-Fried este miércoles, destacando una tensión clave que se cierne sobre la caída de FTX.
Las partes han intercambiado golpes en los últimos días a través de una serie de presentaciones judiciales inusualmente coloridas sobre quién puede acceder a datos confidenciales de FTX. Los abogados con sede en Estados Unidos acusaron a los funcionarios de las Bahamas de trabajar en estrecha colaboración con Bankman-Fried. Los liquidadores de las Bahamas dijeron que tienen derecho a la información para poder limpiar una subsidiaria local.
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El conflicto se intensificó el lunes cuando los funcionarios judiciales de Bahamas exigieron que un juez estadounidense retirara de la supervisión millones de dólares en bienes raíces propiedad de la compañía en la isla. Ese esfuerzo, si tiene éxito, podría dar a los liquidadores el control de millones de dólares más en activos.
“Los tribunales de las Bahamas que tienen jurisdicción sobre los bienes inmuebles no pueden reconocer las órdenes de este tribunal”, argumentaron los liquidadores , citando la ley local. Quieren que el holding que posee los bienes inmuebles, que incluye la sede de la empresa y algunas residencias, sea retirado de la bancarrota de Estados Unidos, según documentos judiciales.
La medida intensifica una batalla entre los funcionarios de las Bahamas y un equipo estadounidense de ejecutivos de reestructuración. Cada lado ha argumentado previamente que debería liderar la búsqueda de activos FTX para pagar a los acreedores. El lunes, los estadounidenses acusaron a las Bahamas de entrometerse en sus esfuerzos al pedirle a Bankman-Fried y a uno de sus cofundadores, Gary Wang, que acuñaran nuevas monedas digitales por valor de cientos de millones de dólares y luego entregar ese dinero a los reguladores de las Bahamas. – todo mientras FTX estaba implosionando.