Monterrey

Plácido Garza: Retador, amenazante y alzado, Maduro va por 6 años más en Venezuela

Aún los presidentes socialistas latinoamericanos dudan del triunfo del chavismo. AMLO calla.

¿Quién copia a quién?

Fue lo primero que me pregunté cuando escuché a Nicolás Maduro decir esta madrugada que pondrá en acción hoy mismo su plan de las 7T.

Cuatro que también vieron su mensaje triunfante fueron Edwin Santos, Liana Ibarra, Cathy Pérez y Richard García, venezolanos con quienes he estado en contacto desde hace dos años.

1. Edwin huyó de Venezuela y trabaja en un hotel del centro de Lima. Vino a Caracas a votar. Si Maduro perdía se quedaría aquí, pero debido a lo que acaba de ocurrir, esta misma semana se regresa a Perú, dejando de nuevo a su esposa y dos hijos adolescentes hasta que ahorre suficiente dinero para llevárselos con él.

2. Liana Ibarra es una manicurista de 35 años. Llegó al centro de votación a las 3 de la madrugada de este domingo y delante de ella había 150 personas en fila. “Antes había mucha indiferencia en las elecciones, pero ya no”. Como ganó Maduro, buscará emigrar a Estados Unidos con su hijo. “No podemos soportarlo más”.

3. Conocimos a Cathy Pérez en Panamá, donde trabajaba en una agencia de automóviles. Fue uno de los millones de venezolanos que no soportaron la vida del socialismo chavista. Quiso llegar a EEUU por tierra y sus peores momentos los pasó en suelo mexicano, donde fue extorsionada por militares y policías. Logró pasar la frontera y estuvo 3 días en el centro de retención de Eagle Pass, Texas. Vivió desde EEUU el proceso electoral de este domingo y ante los resultados verá la forma de ir jalando a su familia poco a poco hacia la libertad.

4. Richard García es amigo de Cathy. La acompañó en su travesía desde Venezuela hasta Eagle Pass. Hoy vive y trabaja cerca de Miami, Florida. Siguió por televisión las votaciones de ayer y va a ver cómo le hace para sacar de Venezuela a su familia.

Estas historias resumen la tragedia del pueblo venezolano desde que Hugo Chávez llegó al poder.

La madrugada de hoy, Nicolás Maduro fue declarado ganador de los comicios electorales en un evento donde Elvis Amoroso, rector presidente del Consejo Nacional Electoral, leyó el boletín oficial que declara presidente electo al heredero de Chávez, pero sin mostrar las actas levantadas en las casillas.

Así, el régimen socialista será superada solo por el dictador Juan Vicente Gómez, quien mantuvo el poder por 27 años, de 1908 a 1935.

A la muerte de Chávez, Maduro llegó al Palacio de Miraflores en 2014 y este será su tercer periodo como presidente. Terminará en el 2030, si antes no termina con Venezuela.

¿Cerrará Maduro la puerta como lo hizo Castro en Cuba?

El chavismo comenzó a devastar a Venezuela en 1999.

Desde entonces han salido más de 8 millones de venezolanos y con los resultados electorales de hoy, muchos más se irán y muchísimos en el exterior ya no volverán.

El último censo de finales de 2023 arrojó una población de 29 millones 300 mil habitantes.

La diáspora continuará y eso hace temer que entre las medidas que Maduro no anunció en su discurso triunfal, está el impedimento para que los venezolanos sigan abandonando al país, como lo hizo Fidel Castro el año 1960 en Cuba.

“Hemos estado perdiendo población por todos lados”, me dijo Anitza Freitez, directora del Instituto de Investigaciones Económicas y Sociales de la Universidad Católica “Andrés Bello”, de Caracas.

Le pregunté si quería que omitiera su nombre por temor a represalias y respondió que no. “Al fin y al cabo, ya me voy, después de ver lo que acaba de ocurrir acá”, añadió.

País de viejos y niños

Me explicó que el 60% de los emigrados tiene entre 5 y 60 años de edad.

“Esto provoca una importante disminución de la población económicamente activa y en un sobre peso de la población dependiente, principalmente los niños y los adultos mayores.

Hoy, 65 personas de cada 100 tienen menos de 15 años y más de 60. “Esto es una gran carga demográfica que obligará a muchos más a irse, con ellos o sin ellos, lo cual hará sufrir aún más la devaluada economía de Venezuela”.

Inflación: 130% anual. Proyección a diciembre: 250- 360%

La moneda venezolana se cotiza hoy en 36.5 por un dólar.

El salario mínimo desde mayo pasado es de 130 bolívares mensuales, equivalentes a 3.60 dólares = 66 pesos mexicanos.

Un kilo de arroz cuesta entre 35 y 37 bolívares, o sea, la tercera parte de un sueldo mínimo mensual sirve para comprar un kilo de arroz.

Por eso la gente acá anda buscando comida en los basureros.

Esto es lo que le ofrece Maduro a los venezolanos, más allá de su discurso triunfalista cargado de retórica, amenazas y alardes.

¿Cuál bloqueo, Nicolás?

Maduro culpa al bloqueo de EEUU y de sus aliados, por las desgracias que el chavismo provoca en la población.

Pero ¿cuál bloqueo, si las remesas de venezolanos emigrados hacia su país se han duplicado en los últimos dos años?

Según la agencia de información financiera, Bloomberg, en 2022 llegaron a Venezuela remesas por 4,200 millones de dólares.

Más de 6,000 en 2023 y en mayo pasado suman casi 8,000.

A Venezuela le sucede lo mismo que a México, donde su economía se sostiene mayormente por las remesas de los mexicanos que viven y trabajan en EEUU.

Están rompiendo los récords año con año desde que López Obrador llegó al poder en 2018.

El año pasado las remesas de los paisanos a México rebasaron los 66,000 millones de dólares.

Ven crecer a sus nietos por zoom

Leonor y Ricardo levantaron a su familia a lo largo de 45 años.

Sus hijos se ganan la vida en cuatro países repartidos en dos continentes.

Por las remesas que reciben de ellos viven decorosamente. “Comida no nos falta”, dice Leonor.

Pero no es la historia de todos los abuelos. Miles de ellos no tienen zoom, ni pasaportes ni recursos para ir a ver a sus nietos cada tantos años.

No tienen dinero ni para las medicinas necesarias por sus edades avanzadas.

Algunos abuelos -como los padres de Edwin Santos- han conservados en Venezuela a sus nietos, pero solo porque al emigrar, no han tenido dinero suficiente para llevárselos con ellos.

Cuando eso suceda, los abuelos se quedarán solos en la patria, “porque mientras más se vuelve uno viejo, se le quitan las ganas de salir”, me dice Leonor, con lágrimas en los ojos.

Ricardo entra al quite. Le pasa un pañuelo a su viejita para que se seque las lágrimas y me dice, taladrándome con la mirada:

“Teníamos muchas esperanzas en María Corina Machado y Edmundo González, pero mañana lunes comienza de nuevo la vida en Venezuela. Hay que trabajar, seguir luchando para sobrevivir y que Dios y nuestros hijos nos ayuden”.

Cajón de Sartre:

  • María Corina le levantó la mano a Edmundo anoche y lo proclamó presidente electo de Venezuela.
  • Pero la expresión sombría de su aliado opositor mostraba algo más que cansancio: resignación y eso es lo que priva en un montón de gente con la que nos hemos topado acá.
  • Los mismos presidentes socialistas del continente le exigen a Maduro que muestre las evidencias de su triunfo, pero no lo va a hacer, porque se siente empoderado por lo ocurrido ayer.
  • Y ante todo esto ¿dónde está López Obrador? Seguramente hoy en la mañanera del lunes invocará a la “no intervención y respeto a la soberanía de Venezuela”.
  • Si lo hace, habrá que recordarle lo que hizo cuando Pedro Castillo fue encarcelado por actos de traición a la patria cuando era presidente de Perú en diciembre de hace dos años.
  • Pero eso, es otra historia.
  • Mañana, cambio completo de programa, sin faltar el Incomparable, Indestructible, Temible y Devastador Iván.

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