El fin de semana pasado se llevaron a cabo las elecciones presidenciales donde resultó ganadora Claudia Sheinbaum de Morena. La victoria fue contundente no solamente para el poder ejecutivo sino para el poder legislativo.
Al parecer Morena tendrá la mayoría calificada para poder modificar la constitución y llevar a cabo las principales propuestas de campaña. Al margen de la victoria de Morena el próximo gobierno tendrá retos económicos importantes que deben de enfrentarse a la brevedad.
Primero, el déficit fiscal este año se elevó considerablemente destacando el incremento en el gasto social y de obras de infraestructura. Para el próximo año se deberán tomar las medidas adecuadas para balancear las finanzas públicas. Existen tres opciones, reducir o recortar el gasto público, elevar los impuestos o endeudarse.
El gasto en protección social se elevó de manera considerable, es mayor al gasto en conjunto en educación y salud, y una promesa de campaña es que se mantendrá. Será importante analizar las propuestas del gobierno federal para incrementar los ingresos públicos.
Segundo, los beneficios del nearshoring no terminan de aprovecharse por factores estructurales relacionados con la capacidad de generación de electricidad, agua y de atracción de capital humano. Diversos expertos en materia energética advierten que el gobierno federal no tiene la capacidad financiera para elevar la capacidad instalada de generación de energía en CFE.
Sin una apertura del sector hacia el sector privado será difícil solventar las necesidades de las nuevas inversiones que buscan posicionarse en el país. Lo mismo se puede decir del sector hídrico que no está abasteciendo adecuadamente a gran parte de la población y al sector industrial.
Tercero, por la falta de mano de obra de calidad. Las empresas que se instalan en el país tienen cada vez más problemas para atraer mano de obra calificada. Las pruebas PISA sugieren que el nivel educativo en el país se deteriora cada vez más.
Será importante implementar políticas para migrar hacia un sistema educativo basado en competencias que ayuden a elevar la productividad laboral.
Así, la nueva administración tiene retos importantes que resolver en un entorno global de una marcada desaceleración económica por episodios prolongados de altas tasas de interés.
La desatención del déficit fiscal podría perjudicar a la inversión futura y complicar a las acciones de política monetaria. Será importante leer con detalle las acciones de política económica que promoverá el gobierno entrante.
El autor es director general de Soluciones Financieras GAMMA y profesor de Economía y Finanzas de EGADE Business School. Tiene un doctorado en Finanzas y maestría en Economía Financiera, ambas por la Universidad de Essex en el Reino Unido.