En el estado de Nuevo León, la obesidad ha alcanzado proporciones alarmantes, afectando no sólo la salud de la población, sino también generando impactos económicos y sociales significativos.
Según datos recientes, Nuevo León lidera las estadísticas nacionales en obesidad, con cifras que le ubican como una de las entidades federativas con mayores índices de sobrepeso y obesidad en niños, adolescentes y adultos en México.
Esta problemática no sóolo conlleva riesgos directos para la salud, sino que también se traduce en un importante impacto económico para la región. La obesidad está asociada con una serie de enfermedades crónicas, lo que implica un aumento en los costos de atención médica y una merma en la productividad laboral.
El problema de la obesidad en Nuevo León no puede entenderse sin examinar sus causas. La disponibilidad de alimentos poco saludables, la falta de acceso a opciones nutritivas y el sedentarismo son factores clave que contribuyen a esta crisis de salud.
La concentración de tiendas de conveniencia y abarrotes en determinados municipios, como Monterrey, San Pedro Garza García, San Nicolás de los Garza, Santa Catarina, Apodaca y Guadalupe, evidencia disparidades en el acceso a alimentos con altos contenidos de calorías.
Desde el punto de vista económico, la obesidad genera un peso significativo en los recursos del estado. La inversión en la atención de enfermedades asociadas así como la disminución en la productividad laboral, debido a problemas de salud vinculados a la obesidad, representan un costo considerable para la sociedad y el gobierno. Un análisis de la Secretaría de Igualdad e Inclusión destaca que estos costos alcanzan el 2.1% del Producto Interno Bruto (PIB) del estado.
La literatura especializada en el tema señala que los Eventos Estresantes en la Edad Temprana han surgido como un factor determinante en la prevalencia de la obesidad. La relación entre experiencias adversas en la infancia con la salud física y mental en la edad adulta es innegable.
Existe evidencia de que el estrés durante la infancia puede desencadenar respuestas fisiológicas que predisponen a las personas a la obesidad en el futuro, de ahí la importancia de comprender la conexión entre las experiencias adversas en la infancia y la salud de los adultos, subrayando la necesidad de intervenciones tempranas y programas de prevención.
Por otra parte, de acuerdo con el reporte Estrategia estatal para la prevención y el control del sobrepeso, la obesidad y la diabetes del estado de Nuevo León, los efectos de la obesidad en la salud colocaron a México en el primer lugar de los países de la OCDE en la prevalencia de diabetes Mellitus para la población de 20 a 79 años.
Ante esta situación, la Secretaría de Igualdad e Inclusión ha tomado un papel crucial en el diseño e implementación de estrategias para combatir la obesidad en Nuevo León. La Ley para prevenir la obesidad y el sobrepeso en el estado y municipios de Nuevo León refleja el compromiso del gobierno por abordar este problema de manera integral.
La promoción de hábitos alimenticios saludables, la creación de entornos propicios para la actividad física y la regulación de la publicidad de alimentos no saludables dirigida a niños son algunas de las medidas implementadas para prevenir y controlar la obesidad. La concientización y la educación en torno a la importancia de la alimentación balanceada y el estilo de vida activo son estratégicos para cambiar la tendencia actual.
La obesidad en Nuevo León va más allá de ser sólo un problema de salud; sus raíces se encuentran en la compleja interacción de factores sociales, económicos y de salud. Abordar este desafío requiere un enfoque integral que involucre a la sociedad, al gobierno y a otras instituciones. La Secretaría de Igualdad e Inclusión juega un papel esencial al liderar iniciativas y políticas públicas que buscan cambiar la realidad de la obesidad en el estado.
En última instancia, aunque el rol del gobierno es muy importante, la lucha contra la obesidad es una responsabilidad de toda la comunidad.
La adopción de estilos de vida saludables, la promoción de la actividad física y la conciencia sobre la importancia de una alimentación equilibrada son pasos fundamentales que permitirán la prevención de un problema que de hecho resultará en un futuro más saludable y próspero para Nuevo León.
Participaron en la elaboración de este artículo: Paulina Badillo G, Rebeca De la Garza G, Melissa Ganem K, Daniela Garza A, Fernanda Rodríguez M y Lorena Villarreal V estudiantes de la Concentración Analítica para negocios: De los datos a las decisiones, que ofrece la Escuela de Negocios del Tecnológico de Monterrey. Jesús Ávila Martínez es profesor de la concentración.
Correo: jesus.avila.martinez@tec.mx