Monterrey

Hiram Peón: ¿Tenemos todo el tiempo del mundo?

O solo tenemos hoy ¿Qué haría si solo tenemos hoy?

En 1969, el trompetista Louis Daniel Armstrong, nacido en Nueva Orleans en agosto de 1901 y fallecido en Nueva York en 1971, cantó una de las melodías más bellas que se hayan compuesto para las películas de James Bond.

Muchas de las canciones de las películas de Bond han sido éxitos internacionales y los mejores interpretes han participado en todas ellas.

La canción que interpretó Armstrong dice en su primer párrafo:

“We have all the time in the world. Time enough for life to unfold. All the precious things love has in store”

En español diría: Tenemos todo el tiempo del mundo, tenemos el tiempo suficiente para que en la vida se desarrollen, todas las cosas preciosas que el amor tiene guardadas.

Luego, en las distintas películas de Bond, se hace referencia a eso: al tiempo. Cuando es muerta su esposa lo menciona. En la última película, unos minutos antes de morir, al despedirse de la madre de su hija, Bond le dice “You have all the time in the world”

Pero bueno, eso sucede en la zaga preparada para despertar las emociones de los fans de Bond.

Pero en la vida real: ¿Tenemos todo el tiempo del mundo? ¿Podemos esperar que la vida nos de la oportunidad de recibir, o desarrollar, todas las cosas que el amor nos tiene guardados?

Piense un poco. ¿Realmente tenemos todo el tiempo del mundo? Quizá los jóvenes puedan pensar eso. Me refiero a los adultos jóvenes, de entre 25 y 45 años, ellos suelen pensar que tienen todo el tiempo del mundo para decidir que hacer.

Puede ser que sientan miedo a equivocarse, y así, postergan su decisión mientras adquieren la tranquilidad para pensarlo o mientras descubren en donde y en qué son buenos.

Los mayores de esa edad, 45 años, no tienen tan claro si realmente tienen todo el tiempo del mundo. Mas bien sienten que la vida empieza a pasar más rápido de lo esperado.

La verdad, bueno, lo que yo pienso, es, como dice Julia Roberts en la película “Ticket to paradise”: ¿Por qué dejar lo bueno para más adelante?

Es una frase muy manida, pero muy real. ¡Para que dejar lo que consideramos bueno para más adelante!

Es como vivir a medias. Es como tratar de subir una pendiente, en un vocho, con el freno de mano puesto.

No hay una buena edad para dejarse ir. Ésta, la edad que usted actualmente tiene, es la edad perfecta para hacer lo que siempre ha soñado, lo que usted considera bueno, lo que usted quiere de la vida, por una simple razón: Nadie tiene todo el tiempo del mundo. Todo puede terminar hoy. Todo puede terminar mañana.

Así que mañana, abra los ojos, de gracias por estar vivo y levántese a disfrutar las cosas buenas que siempre quiso.

Ese trabajo que siempre pensó que merece. Esa comida. Póngase esa ropa que tanto le gusta. Compre esos boletos de avión y vallase de viaje a conocer ese lugar que siempre soñó. Tome el teléfono y llámele a esa persona que siempre quiso conocer y dígale lo que siente. Ese emprendimiento en el que tuvo fe desde muy joven y que nunca se atrevió, hágalo ahora.

Mañana, mañana no existe. Solo existe hoy. Así que hágalo hoy. Deje de vivir en su cabeza, en sus pensamientos. Observe su vida, pero solo por un momento, luego salga a la calle y viva. Atrévase, sienta lo que es manejar una bicicleta en una pendiente. No importan los demás, solo importa lo que usted vive. No se limite por lo que otros le han dicho, no se limite simplemente porque en el pasado no funcionó.

Hoy es hoy. Hoy usted es diferente y solo por eso puede obtener el resultado que siempre quiso.

Que nadie le destruya sus sueños. Hoy es el mejor día para hacer sus sueños realidad. Así que ¿Para qué guardar lo bueno de su vida, para más adelante?

Mantengamos viva la esperanza. Mantengamos la fe. Hasta la próxima.

El autor es experto en comunicación corporativa y situaciones de crisis. Cuenta con un MBA del ITESM.

Mail: hirampeon@gmail.com

Twitter: @Hirampeon

COLUMNAS ANTERIORES

Estima Realty Experts crecimiento de hasta 6% del mercado inmobiliario en 2026
Nace Realty Experts en México y deja atrás su marca previa Realty World

Las expresiones aquí vertidas son responsabilidad de quien firma esta columna de opinión y no necesariamente reflejan la postura editorial de El Financiero.