Erika Buenfil responde críticas sobre fiesta ‘ostentosa’ de su hijo: ‘Para eso trabajo’

El pasado 2 de febrero, el hijo de Erika Buenfil cumplió 18 años, por lo que la actriz organizó una gran fiesta que se llevó a cabo el 11 de marzo; no obstante, fue objeto de críticas, pues la catalogaron de frívola y cuestionaron el gasto que hizo.

Después de toda la serie de críticas que recibió Buenfil, decidió aclarar que la fiesta de su hijo, quien estaba cumpliendo la mayoría de edad, no había sido tan cara como parecía, aunque también destacó que todo su trabajo es para poder consentir a su hijo en lo que le sea posible.

En una entrevista para el programa De Primera Mano, la también tiktoker señaló que antes de que cumpliera 18 años, existía una especie de tradición entre ella y su hijo: invitar la misma cantidad de personas que su número de años.

“Me dijo: ‘Ya vienen mis 18′ y le digo: ‘18 (personas)’ y me dice: ‘¡Estás loca m,amá! Son mis 18′ y dije: ‘Bueno, ¿cuántos?’ Y me dice: ‘180′, y efectivamente fueron 230 invitados, hice un fiestón y la pasamos bomba”, compartió.

Fiesta engañosa: Erika Buenfil dijo que no fue tan costosa como parecía

Para defenderse de todos los comentarios negativos que recibió sobre los gastos de la fiesta, Erika explicó que en realidad no fue tan ostentosa como parecía, pues algunas cosas las consiguió gracias a patrocinios de marcas, e incluso las compró en tiendas del centro de la CDMX.

“Nicolás se fue al mercadito, al mero centro, a la Merced, para comprar todo el kit de gorritos y todo. No es que yo me haya ido a la tienda más cara”, explicó la histrionisa.

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Buenfil de 59 años, mencionó que, incluso, el vestido que llevó aquel día ya lo había utilizado en una boda.

“La verdad se veía más cara de lo que realmente era, yo creo que lo más caro fue la bebida, pero esa la compré yo en tiendas de rebajas. Mi vestido era uno que había usado en una boda, pero se veía más de lo que era”.

Además, aseguró que ella trabaja para poder compartir con su hijo, y señaló que ella, como toda la gente, comparte no solo lo aparentemente caro, sino lo más sencillo

“Yo veo gente que sube carros caros, que sube viajes caros, y yo subo mis viajes a Acapulco, y también hago viajes de todo, pero para eso trabajo, para darle a mi hijo satisfacciones”, aseveró.