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Julio Urías detenido ¿Quiénes son los beisbolistas mexicanos en problemas con la ley en EU?

En los años recientes el beisbol mexicano no solo ha dado de qué hablar en el diamante, sino también por problemas como el de Julio Urías y otros con la ley.

¿Qué tienen en común Julio Urías, Roberto Osuna y Esteban Loaiza? En que a nivel deportivo tienen los dos primeros, y tuvo el último, la capacidad para ser de los mejores beisbolistas mexicanos de la historia.

Sin embargo, así como esta tercia ha acaparado los reflectores por sus hazañas en el diamante, también su historial deportivo y personal ha quedado manchado por tener problemas con la ley.

Mientras decenas de jóvenes prospectos mexicanos buscan la oportunidad de su vida de llegar a Grandes Ligas, Urías, Osuna y Loaiza desaprovecharon estar en la mejor liga de beisbol del mundo.

A estos tres peloteros mexicanos debemos sumar al joven prospecto Jesús Camargo Corrales, quien nunca debutó en Grandes Ligas, y que no lo hará puesto que enfrenta una larga condena en Estados Unidos.

Julio Urías y sus problemas de agresión

Julio Urías fue detenido por segunda vez en su vida este domingo 3 de septiembre por la noche acusado, nuevamente, de violencia doméstica. Tras pagar una fianza de 50 mil dólares quedó libre, pero también fue separado del roster de Los Angeles Dodgers.

La primera ocasión que Urías fue acusado de un cargo similar fue en 2019, luego de que una mujer, quien presuntamente era su pareja, lo señaló de haberla empujado al suelo dentro de un centro comercial.


En aquella ocasión, la mujer determinó no presentar cargos, por lo que el originario de Culiacán, Sinaloa, salió en libertad tras pasar una noche en la cárcel; sin embargo, Grandes Ligas lo suspendió 20 juegos.

En caso de comprobarse esta segunda acusación, Urías podría ser dado de baja de MLB y ver cortado su sueño, en una temporada en la que se le termina el contrato con Dodgers y cuando se le veía como uno de los mejores agentes libres de 2024 que podrían conseguir un contrato multimillonario.

Roberto Osuna y el precio a pagar

El también sinaloense Roberto Osuna, con pocas temporadas en Grandes Ligas, se perfilaba para ser el mexicano con más juegos salvados en algún momento de su carrera; sin embargo, su paso por el beisbol estadounidense quedó cortado por un problema con la ley.

En 2018, ‘El Chufito’ fue acusado de haber golpeado a una mujer, de la que nunca se supo su identidad, en Toronto, cuando jugaba para los Azulejos de aquella ciudad canadiense.

Ese mismo año, Osuna fue cambiado a los Houston Astros, con quienes jugó hasta 2020, año en que una grave lesión lo dejó fuera y fue el pretexto ideal para que, desde entonces, ningún equipo estadounidense lo llame, teniendo que jugar en México con los Diablos Rojos y actualmente en Japón.

La debacle de Esteban Loaiza

En la temporada 2003, Esteban Loaiza hizo soñar a la afición mexicana al beisbol con que sería el segundo pelotero tricolor en ganar el trofeo Cy Young, tras una temporada en la que ganó 21 juegos con los Chicago White Sox.

Aunque al final no obtuvo la distinción, Loaiza continuó su carrera en MLB, sumando 14 temporadas con ocho diferentes equipos y siendo uno de los cinco pitchers mexicanos con más juegos ganados con 126, sólo detrás de los 173 de Fernando Valenzuela.

Tras retirarse jugando en México con los Diablos Rojos y Delfines del Carmen, Loaiza obtuvo fama en la farándula al estar casado con la cantante Jenny Rivera, quien murió en un accidente aéreo en 2012.

Los problemas legales de Loaiza ocurrieron en 2018, cuando fue detenido en San Diego en posesión de 20 kilos de cocaína para su venta, situación que desconcertó, pues como beisbolista ganó 43.7 millones de dólares.

Loaiza fue sentenciado a 36 meses de prisión, que al cumplirlos fue deportado a México y actualmente es coach de pitcheo con el Águila de Veracruz.

Jesús Camargo Corrales con la sentencia más larga

En marzo de 2021, Jesús Camargo Corrales, prospecto mexicano de los Chicago Cubs, fue detenido en una carretera en Colorado, y se le decomisaron 10 kilos de metanfetaminas y medio kilo de pastilla de fentanilo.

Aunque originalmente se declaró no culpable, para evitar la pena más alta de 32 años, el mexicano aceptó ser culpable, quedando su sentencia en 14 años y perdiendo para siempre la posibilidad de debutar en Grandes Ligas, pues saldría a la edad de 39.

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