El 8M, las oportunidades y las empresas en medios digitales

Ya culminaron las marchas, celebraciones, mensajes de felicitación, fotos de mujeres importantes y posts en redes sociales sobre el Día Internacional de la Mujer. Sin embargo, y es parte del discurso que los medios digitales y los activistas en favor de las mujeres han sostenido, el Día Internacional de la Mujer no tendría que ser solo uno. Debería ser una reivindicación permanente del trabajo que realizan las mujeres en los diferentes ámbitos en los que ellas ejercen, así como un cúmulo de oportunidades que les permita seguir contribuyendo a la formación de la sociedad.

A diferencia de años anteriores en que los medios digitales eran más reacios a las manifestaciones del 8M, en este caso más de 83 por ciento de la audiencia digital apoya el movimiento y se solidariza con las demandas de las mujeres. #8M, #NiUnaMenos y #DíaInternacionalDeLaMujer son algunos de los hashtags que año con año se han ido posicionando en México.

Mi hermana Tatiana Céspedes, a quien admiro profundamente por su tenacidad y compromiso, escribió hace poco que “la inclusión de las mujeres en todos los sectores (económico, político y social) es fundamental por el talento que aportan, pues armonizan las organizaciones donde hacen presencia. La labor humanizadora de la mujer logra formar tejidos sociales fuertes, éticos y sostenibles. Más mujeres en cargos directivos lograrán llevar la equidad y el sentido humanista a la práctica.”

De acuerdo con la empresaria argentina Silvia Mochini de SheWorks, “si quieren empoderar a las mujeres que no nos den ánimos, sino oportunidades. Si no hay independencia económica, no hay empoderamiento que valga”. Es así como en México, y Latinoamérica en general, empresas de todos los sectores, por visión, misión o responsabilidad social, se han vuelto no sólo más incluyentes sino también más conscientes del papel preponderante de las mujeres en la sociedad.

He sido y sigo siendo muy afortunada como hija, esposa, madre y empresaria. Mis padres me enseñaron el valor del trabajo, mi esposo el apoyo incondicional, mis hijas la motivación y la empresa el motor de mi vida. Y aunque ya contamos en Metrics con más de 50 por ciento de mujeres, entiendo que es solo un granito de arena en un mar de oportunidades donde las protagonistas somos nosotras.

En este sentido, me puse como tarea investigar aquellas empresas donde su perspectiva era no solo la de contratar más mujeres sino que adicionalmente cuentan con políticas flexibles que les permiten ser lo que la sociedad misma demanda de ellas en Latinoamérica.

Encontré en varios sectores. En el sector restaurantero, Crepes & Waffles que contrata principalmente mujeres cabeza de familias en todos los puestos y Toks reconocida por el proyecto ‘Huevo de gallina libre de jaula’ con el que se apoya a las mujeres de la comunidad maya.

En el sector gasolinero, un área que no era muy cercana al género femenino, Rendichicas, empresa ubicada en la región norte de México, desarrolló un programa no solo para emplear principalmente mujeres, sino también para empoderarlas.

Empresas textiles como la división de Grupo Éxito o de retail como Unilever también se han esforzado por tener una amplia plantilla laboral femenina, y tener políticas flexibles, capacitaciones y campañas en favor de las mujeres.

Y ni qué decir de las ‘nenis’, nombre coloquial por el que se conoce a aquellas mujeres emprendedoras que venden todo tipo de productos (lencería, cosméticos, ropa, decoración, comida…) directamente o a través de redes sociales y que se estima que mantienen a más de 13 millones de hogares.

Las mujeres hemos caminado por un sendero lleno de obstáculos que no se van a acabar, pero donde cada vez existe una mayor conciencia de nuestro valor y sobre todo del aporte a la sociedad. De nosotras mismas depende que no sea solo un sendero y que no se reduzca a un día, sino que sea un verdadero camino.

Y “se hace camino al andar”…