Sobremesa

Muertos del coraje

Lourdes Mendoza escribe que, a propósito de Halloween y del Día de Muertos, personajes como Armando Ríos Piter y Miguel Ángel Barbosa andan muertos del coraje.

A propósito de Halloween y del Día de Muertos, déjenme decirles que quien anda muerto del coraje es ni más ni menos que el Almirante José Luis Vergara, y no es para menos, pues, aunque se la pasó promocionándose entre propios y extraños, afirmando que "él" era el elegido para ser el nuevo secretario de Marina en el gobierno de AMLO, se quedó con las ganas. De invitarle un taco de lengua y aguacate ni hablamos, pues le caería muy pesado.

Otro que también anda muerto del coraje es Armando Ríos Piter. ¿La razón? Su amigo Meade lo invitó a que se sumara a la consultoría que puso con Mikel Arriola y a la que se sumará Pepe Toño González Anaya, el pero fue que a la hora de sentarse a platicar, Mikel le dijo: ¿y tú qué nos sumas? Por lo que Armando agarró sus cositas y se fue. A Ernesto Cordero también lo invitaron y lo anda pensando. Ah, y la que anda como Chucky el muñeco diabólico, porque nadie la ha felicitado por comprar, ah no, por llevarse el premio a la mejor campaña de identidad partidista (o sea, por convencer a los priistas de votar por Meade) es Alejandra Sota, gracias al tema del aeropuerto. Sólo un apunte: Mit obtuvo 9 millones de votos, mientras el PRI alcanzó 11.5 millones. ¡Quihúboles, algo no suma!

Ahora bien, quienes andan muertos, pero de la envidia, son quienes conocen a Héctor Giordano junior, mejor conocido como el Pollo. Pues, así como los hijos de Arturo Montiel o los de Martita Sahagún salieron muy visionarios y con un olfato empresarial espectacular, el Pollo también tiene lo suyo. Baste decir que el cuñado del doble compadre del presidente EPN, Benito Neme, director de Capufe, pasó en sólo siete años de ser capitán de meseros del Dady'O a un próspero empresario, quien, a sus 37 años, hasta yate ya tiene y lo presume en Facebook (nada discreto). Ah, antes de ser empresario y tras dejar el Dady'O, estuvo un rato en el PRI Nacional, en la Secretaría de Finanzas.

Otro que anda como muerto, pues no lo calienta ni el sol, es Miguel Barbosa, y no es para menos, ya que todo parece indicar que No será gobernador porque en Morena no lo quieren. De entrada, por haber sido el último en irse en un oportunismo brutal. Por haber sido parte fundamental del Pacto por México e ir de la mano siempre con Emilio Gamboa. Súmele que no tiene arraigo alguno en Puebla. Estado del hijo de Elba Esther, léase Moreno Valle, quien, junto con Andrés, tienen en común el color del tinte, ah no, perdón, ese era Gali, y el odio –así como lo están leyendo– contra Miguel Ángel Yunes. Ah, y no menos importante es que No fue a la boda de César Yáñez, y a Gali hasta lo sentaron en la mesa de honor. ¿Será que mejor tendrá que dedicarse a vender camotes?

Otra que anda muerta del coraje, aunque físicamente se ve mejor que nunca –ojalá nos diga qué se hizo y con qué doctor– es la maestra Elba Esther Gordillo. Resulta que el pasado 20 de octubre venció el periodo para el que fue electa como dirigente del SNTE, en 2012. Así pues, y aunque recuperó sus derechos al ser liberada de los cargos de los que la acusaba EPN, jurídicamente el daño es irreparable. Quizá por eso cambió la estrategia. Ojo, fue liberada en el momento en que AMLO recibió su constancia como Presidente electo. Anunció su regreso cuando se reunieron los gabinetes entrante y saliente en Palacio Nacional, y Andrés declaró, en la cara de Peña, que iba a echar abajo la Reforma Educativa. Y justo cuando se le vence su periodo y sin tener activas las bien pagadas plazas de maestra de las que gozó toda la vida –sin ejercer–, la maestra (que hoy no es maestra) declara la guerra: "Juan Díaz tiene la chequera del SNTE, yo tengo el liderazgo". En camiones de Puebla, Edomex y Nuevo León mandó un ejército (o una tropa) de mil 200 manifestantes a la Cámara de Diputados. Promovió una demanda jurídica ante la PGR contra dirigentes del SNTE y terceros por supuesto fraude.

COLUMNAS ANTERIORES

¿Vidas paralelas?
Claudia se quiere deshacer de Clara

Las expresiones aquí vertidas son responsabilidad de quien firma esta columna de opinión y no necesariamente reflejan la postura editorial de El Financiero.