Sobremesa

Hasta aquí

Margarita Zavala dice que ‘México no merece este momento, ni merece este dolor, ni merece esta angustia, ni esta incertidumbre’.

El sábado pasado acompañé a Margarita Zavala a la colonia Verónica Anzures para documentar cómo hacía campaña para ser diputada federal por el Distrito 10 en la Miguel Hidalgo quien fuera en su momento primera dama, excandidata independiente a la presidencia y quien buscó crear su partido México Libre, el cual no logró el registro por un doble rasero de algunos de los magistrados en el Tribunal Electoral.

Comenzó en la esquina de Bahía de Chachalacas (acepten que se acordaron de Vicente Fox y hasta esbozaron una sonrisa, ¡no se hagan!) y Bahía de Todos los Santos, donde comenzaba un mercado sobre ruedas. Saludó a quien se cruzaba, se presentaba, los escuchaba y les pedía su voto y que no fueran a votar solos, sino que llevaran al primo, amigo, familiar o a todos, pero que votaran. No entregaba más allá de un flyer o unas cuantas bolsas para el mandado.

Ahí, en esa colonia, una maestra le abrió las puertas de su casa, bueno, del jardín y guardando la sana distancia y usando tapabocas. Margarita pidió a los presentes:

“Quiero que todos traigamos en este momento, aquí a la mente a un familiar que perdió su empleo en los últimos meses, al amigo que cerró su negocio, o a un grupo de meseros que trabajaban juntos… al joven que estaba poniendo una empresa y que ya no la pudo poner. Piensen en lo mucho que ha sufrido una mamá o un papá con la educación de los hijos. Traigan el esfuerzo que hacen los maestros, las maestras, yo soy maestra, y sabemos muy bien que nuestros alumnos no están aprendiendo igual. O a la mamá buscando vacunas, y no de Covid, sino del cuadro básico de vacunación. Traigan en este momento, aunque nos duela mucho, al familiar que perdimos por el Covid, o a la comadre que también perdimos porque le dijeron que no tenía que hacerse pruebas, al que le dijeron que tenía que quedarse en su casa. O a quienes no encuentran sus medicinas y día a día agravan su salud”.

TODO ERA EVITABLE…

“Traigan en este momento todo este dolor, y me duele decirles que todo eso era evitable, era evitable porque tuvo que ver con decisiones políticas, en materia de salud, de educación y de seguridad.

La política tiene que ver con nosotros, con nuestra vida diaria, y hoy podemos cambiar las cosas. México no merece este momento, ni merece este dolor, ni merece esta angustia, ni esta incertidumbre. Este 6 de junio tenemos la oportunidad para decirles: hasta aquí”.

Les dijo, además, que deben votar para que el país tenga pesos y contrapesos en el Congreso y así poder recuperar el rumbo de la nación. Recordó que desde los 16 años está en la política y que le ha tocado ver muchas cosas como –inhalen y exhalen, pues verán cómo suspiran– un México capaz de vacunar a 11 millones de mexicanos en una semana, a mamás que habían metido a sus hijos para que los atendieran de leucemia y que, en cinco años, estaban remisos, o a madres agradecidas porque su hijo o bebé pudo tener tres operaciones del corazón sin pagar un solo peso, pero que hoy ese México dejó de existir.

Me llamó la atención que, con quien platicaba, le explicaba no sólo que en el Congreso se hacen las leyes, sino que, si la oposición cuenta con votos suficientes, no sólo podrían revertir malas decisiones, como eliminar las estancias infantiles, sino volver a visibilizar a las mujeres. Y no menos importante, que los haríamos dialogar, sí o sí (obvio hablaba de Morena y sus aliados). Pues hoy, aseguraba –y es cierto– un solo hombre toma las decisiones y sus diputados lo representan a él, no a la ciudadanía.

Fíjense, les decía a unas señoras que se quejaban de la inseguridad, “el presupuesto para seguridad subió más-menos el 1.3 por ciento del año pasado para ahorita; es increíble, es nada, pero además, dicen, se los dieron al Ejército, a la Sedena, pues ni eso, se los dieron pero para ladrillos, para que hagan el aeropuerto. Si no cambiamos la ecuación política, si no hacemos un contrapeso, no podremos defender la democracia con diputados que se vendan”.

Y PASAREMOS DE LA OPOSICIÓN A LA RESISTENCIA

“El país necesita equilibrios, así de simple. Mis propuestas son: 1.- Reactivar la economía, apoyando a quien trabaje e invierta. 2.- Regreso a clases seguro. No más manipulación política. Vacunas para todos. 3.- Apoyo a las mujeres. Alto a la violencia y que vuelvan las estancias infantiles”.

SACIAMORBOS

Nadie la agredió. Nadie le dijo nada sobre su marido. Además, de Verónica Rubín, compañera de fórmula, entre otros, la acompañaron, por ser fin de semana, Federico Döring y la priista Lucía Ruiz de Teresa. Comió con seis personas en Mariscos Don Panchito en Bahía de Santa Bárbara y de ahí se fue a un crucero a pedir el voto y luego a un evento para apoyar a un chavo del PAN juvenil.

SOBRE ZALDÍVAR...

¿Cómo no preguntarte sobre el tema? “Él dice estar impedido para prejuzgar, pero también prejuzgó cuando estuvo presente en la iniciativa enviada por el Presidente en un acto formal, y, pues sí intervino de algún modo en el proceso. Pero en todo caso debió haber sido claro desde el primer día, decir por qué está impedido y bajo qué ley.

En épocas de incertidumbre, una persona como él debería ser cortés con los ciudadanos y ser más claro”.

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