La agricultura es el que consume más agua, entre 50 y 60 por ciento del agua dulce disponible, aunque es el que más desperdicia. Tan solo en México, el 57 por ciento del total utilizado se malgasta, principalmente, por infraestructura de riego ineficiente.
La problemática del suelo es un asunto al que prácticamente no se pone atención. La buena noticia es que sabemos lo que tenemos qué hacer para que las futuras generaciones tengan también un suelo el día de mañana.
En los últimos meses y desde la declaración de la pandemia, nos dimos cuenta del papel fundamental que juega dicha actividad en la vida de todos, dice Gianni Canneti.