Confidencial

‘Es que están muy enojados’…

Bueno, hay que tomar las cosas de quien vienen, neoliberales que están muy enojados porque, al menos en México, se acabaron sus privilegios. ¿O cómo era?, señala Confidencial.

Vaya sorpresas con las que salen los conservadores. Ahora resulta que, según el Índice de Democracia 2021 elaborado por The Economist, México pasó de ser una “democracia defectuosa” a clasificar como un “régimen híbrido” que va “en camino al autoritarismo”. En la medición de la revista británica, el país de la 4T retrocedió a 5.54 puntos, cuando en 2020 había obtenido 6.07 puntos. Bueno, hay que tomar las cosas de quien vienen, neoliberales que están muy enojados porque, al menos en México, se acabaron sus privilegios. ¿O cómo era?

Malas prácticas en el pleno

Durante la sesión de pleno ayer en el Senado, la panista Lilly Téllez encendió los ánimos de la bancada morena y sus aliados, luego de que solicitó atentamente al presidente en turno de la Mesa Directiva, José Narro Céspedes, evitarle a la asamblea el desagradable espectáculo de verlo chuparse los dedos o estarse “metiendo los dedos a la nariz”. Por ello le sugirió –ante el micrófono– que le acerquen una servilleta y que porte un pañuelo. La senadora guinda Margarita Valdez, en defensa del legislador zacatecano, exigió a Téllez que se disculpara públicamente con él. Así el nivel en la Cámara alta.

Desaire de las eléctricas a diputados

Fuerte fue el jaloneo entre Morena y la oposición del PRI y el PAN para lograr que las empresas de la industria eléctrica fueran invitadas a los foros de la reforma eléctrica. Todo para que esas empresas desairen la invitación de los legisladores, se quejan entre bancadas. “Ni siquiera nos han contestado la invitación y deberían de contestar, es un foro especial para que vengan ellos y estamos esperando a que vengan, que vengan los señores de Iberdrola, que aclaren si pagan el porteo, si pagan el respaldo, cómo hacen sus sociedades”, demandó molesto el líder priista en San Lázaro, Rubén Moreira.

Porras presidenciales

Qué pena con las visitas… El presidente López Obrador no mostró empacho en compartir que le lanzó una consigna a Ken Salazar, embajador de EU en México, frente a John Kerry, encargado de asuntos del clima, para respaldarlo por su apoyo a la reforma eléctrica. Y es que –dijo el mandatario– los gringos le “cayeron encima” al diplomático por haber expresado su acuerdo con la iniciativa, ante lo cual lo animó con un: ‘¡Ken, aguanta, el pueblo se levanta!’.

Cervantes marcha a la cabeza por el CCE

A poco más de dos semanas de que se defina la sucesión en el Consejo Coordinador Empresarial, el expresidente de Concamin, Francisco Cervantes, parece el candidato con más posibilidades de obtener los cinco votos necesarios para encabezar el organismo cupular. El industrial ha logrado reunir importantes respaldos por su perfil negociador y el buen acceso que tiene con todas las fuerzas políticas. Algo positivo en este proceso es que, tras un encuentro de los dos candidatos la semana pasada, Cervantes y Bosco de la Vega, hubo el acuerdo para que la contienda sea civilizada y no ponga en riesgo la unidad del sector empresarial.

¿Jueces de consigna en Veracruz?

De quién será la mano que se mueve tras la renuencia del juez de control Francisco Reyes Contreras, por entregarle al juez de Distrito un informe pormenorizado y justificado sobre su decisión de vincular a proceso a José Manuel del Río Virgen, por lo que sus familiares están preocupados de que al no hacerlo a tiempo o en el plazo fijado, se estaría prolongando la estancia del político en la cárcel en Veracruz, donde permanece desde el 22 de diciembre, sin que hasta la fecha haya alguna prueba que lo relacione al homicidio del que se le acusa. Y es que a esa obstrucción a la justicia se suma el hecho de que la Fiscalía de ese estado se ha negado a entregar copias autenticadas de la investigación a los defensores del detenido. ¿No que en la entidad la justicia marcha sobre ruedas?

COLUMNAS ANTERIORES

Más agua contaminada en CDMX
Pendiente de La Máquina

Las expresiones aquí vertidas son responsabilidad de quien firma esta columna de opinión y no necesariamente reflejan la postura editorial de El Financiero.