Colaborador Invitado

¡Es la clase media!

Gobernar con las clases medias, que son las más ilustradas y conscientes, pueden ser artífices, como ha ocurrido en muchos casos, de los grandes cambios en la historia.

Óscar Mario Beteta

Las clases medias están vivamente presentes en la vida política del país; son un potencial que, cualquiera que sea el sucesor del presidente López Obrador, deberá considerar y aprovechar como una parte fundamental de su Proyecto de Nación.

Al hablar de su libro El Camino de México, durante su presentación en el Palacio de Minería, Marcelo Ebrard hizo hincapié en que el país se encuentra ante una oportunidad única para crecer, gracias a que tenemos la economía con los mejores números de América y una población con una edad promedio de 29 años.

En su obra autobiográfica, que permite conocerlo plenamente y visualizar la idea de país que querría construir, subraya:

“El fin último de toda política de izquierda en México es aumentar aceleradamente la proporción de las clases medias en la población”.

Según el INEGI, hoy la clase media representa sólo el 37 por ciento de la población. Debemos rebasar el 51 por ciento en esta década. Cambiaría la morfología del país y su capacidad de crecer.

Si tenemos en cuenta que, en 2022, de 130.3 millones de habitantes, 48.2 millones formaban parte de un hogar de clase media, mi objetivo es hacer crecer ese segmento a 51 por ciento de la población, lo que equivale a tener un total de 66.5 millones de mexicanos en clase media”.

Si esa oportunidad se empezara a concretar, no hay duda de que apuntaría a la construcción de la mejor sociedad, el mejor país, la mejor democracia y el mejor Estado posibles. Y no podría descansar más que en las clases medias.

El canciller apuntó: “…el poder no es frivolidad, sino un instrumento para transformar a la sociedad…”. Y una verdadera, sólida y duradera transformación, entendida siempre como un proceso que no cristaliza en un sexenio, implicaría equilibrar las condiciones de vida de toda la población, de tal modo que no haya un puñado de ricos y grandes masas de miserables.

Para el genuino estadista, el equilibrio social es un objetivo prioritario y permanente, pues sabe, en línea con Aristóteles y otros grandes pensadores, que la virtud es el medio y que este, referido a la composición de una sociedad, son las clases medias, que se caracterizan por tener un poder adquisitivo suficiente para cubrir todas sus necesidades e, incluso, permitirse algunos lujos.

Para llegar a esa oportunidad única de la que habla Ebrard, sería indispensable empezar por hacer efectiva la garantía del primer bien contenido en todo contrato social, que es la seguridad personal y la de los bienes de los gobernados; reforzado con la educación, tendría los cimientos para alcanzar todo lo demás Desde la antigüedad, Aristóteles identificó la conveniencia de privilegiar el gobierno de las clases medias. En su Política sostiene:

“En todas las ciudades (…) hay los muy ricos, los muy pobres, y los intermedios entre unos y otros. (…) Lo moderado y lo que está en el medio es lo mejor (por lo que), una moderada posesión de bienes, es la mejor de todas”. Esta es la impronta de las clases medias.

La ciudad que se funda en estas –puntualiza–, será la mejor organizada; la que tiene mayor estabilidad. “La mayor fortuna para una ciudad consiste en que sus miembros tengan un patrimonio moderado y suficiente (…) El régimen intermedio es el mejor (…) es el único libre de facciones, disensiones, sediciones (…) cuando falta la clase media y los pobres alcanzan un número extremado, sobrevienen la adversidad y la ruina. Y las democracias son más seguras y de más larga duración que las oligarquías a causa de la clase media”.

Por ende y en su momento, el canciller seguro hará énfasis en las ventajas que tiene gobernar con las clases medias que, además, son las más ilustradas y conscientes; las que tienen una mejor situación y pueden ser artífices, como ha ocurrido en muchos casos, de los grandes cambios en la historia.

Hoy, después de haber impulsado a AMLO al poder con los 15 millones de votos que representan, están vivamente presentes en la vida política del país; son un potencial que, cualquiera que sea el sucesor del presidente López Obrador, deberá considerar y aprovechar como una parte fundamental de su Proyecto de Nación.

Sotto Voce.– Que ha iniciado una profunda investigación para saber quiénes son los responsables del mal arranque y el estado tan lamentable que guarda el Banco del Bienestar… Magnífico ambiente y gran oportunidad de convivencia para ratificar lazos de amistad –como la que ha prevalecido desde hace algunos años– los que se dieron durante la cena de las 70 familias más ricas de Latinoamérica, a la que convocó el miércoles, el ingeniero Carlos Slim, celebrada en el Museo Soumaya… En la terminal portuaria de Calica, en Playa del Carmen, Quintana Roo, escala el conflicto entre Cemex y Vulcan Materials. Después de mantener durante 20 años una magnífica relación de negocios, ésta se descompone a pasos agigantados por la intransigencia y los abusos cometidos por la empresa norteamericana.

COLUMNAS ANTERIORES

Hot Sale 2024: 4 oportunidades para capitalizar esta temporalidad
México cumple formalmente, pero no en esencia con Estados Unidos

Las expresiones aquí vertidas son responsabilidad de quien firma esta columna de opinión y no necesariamente reflejan la postura editorial de El Financiero.