Hace unos días, nuestro país fue el anfitrión del foro global más importante en materia de privacidad y protección de datos personales. En el marco de la 43° Asamblea Global de Privacidad, México, a través del Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales contó con la confianza de las autoridades de la privacidad del mundo, para asumir la presidencia de la Asamblea para el periodo 2021-2023.
Desde 1979, esta iniciativa multilateral impulsa el intercambio de información técnica, la retroalimentación continua sobre procedimientos y buenas prácticas, así como aprendizajes y reflexiones, para contribuir a una mejor gobernanza y tutela de la protección de datos personales. En la 43° edición, los más de 90 miembros y los observadores, reunidos de manera virtual, votaron una resolución relativa al futuro de la asamblea y se adoptó un plan estratégico centrado en el desarrollo de las capacidades de todas las partes que integran este organismo. Asimismo, como parte de los trabajos de análisis y deliberación, se acordó la adopción de resoluciones de alto nivel sobre temáticas de amplio interés para la sociedad: el intercambio de datos para el bien público, los derechos digitales de las y los niños, y el acceso del gobierno a los datos.
En el caso de la resolución relativa al intercambio de datos para el bien público, la Asamblea reconoció que tanto la crisis sanitaria por el Covid-19, como los procesos de recuperación, han acelerado el uso y tratamiento de datos personales en la integración de respuestas y soluciones innovadoras. Por lo que se enfatizó la necesidad de establecer medidas que salvaguarden la privacidad y la seguridad de los datos de las personas, mediante la plena observancia de los principios y deberes en materia de la protección de los datos, la transparencia y la rendición de cuentas, por parte de los responsables.
Por otro lado, un punto que debemos destacar sobre la resolución en materia de los derechos digitales de las y los niños, reside en su reconocimiento como sujetos que pueden ejercer, con autonomía y conocimiento, su autodeterminación informativa, esto es, su poder de decisión sobre el control de su información personal y los datos derivados de su navegación en línea. Celebramos que este enfoque, centrado en las capacidades y los intereses de las y los menores, busque un equilibrio apropiado que proteja a las infancias y a su autonomía en el uso y aprovechamiento de las tecnologías, ello mientras se minimizan los riesgos a los que están expuestos mientras interactúan en el entorno digital.
Ahora bien, en cuanto a la resolución relativa al acceso gubernamental a los datos, la Asamblea Global enfatizó la importancia de la transparencia de los acuerdos e informes derivados del acceso de las autoridades a los datos personales. Asimismo, se recomendó la consideración de controles legislativos que dispongan la supervisión independiente por parte de un organismo regulador autónomo.
Indudablemente, estas resoluciones sentarán un precedente importante para los Estados miembros. Ya que, además de su naturaleza, su alcance social, y su perspectiva desde los derechos humanos, las resoluciones adoptadas por la Asamblea Global de Privacidad fueron construidas desde un enfoque colaborativo que sumó el valioso conocimiento, buenas prácticas y la experiencia de servidores públicos que trabajan a favor de la protección de datos personales y la privacidad. Celebro el papel que desempeñó México en el alcance de los acuerdos, y aprovecho este espacio para reconocer los resultados alcanzados y la labor de la Comunidad del INAI, bajo el liderazgo y coordinación de mis colegas Josefina Román Vergara, y Francisco Javier Acuña Llamas.
Las personas interesadas en la lectura de estas resoluciones pueden localizarlas en: https://globalprivacyassembly.org/document-archive/adopted-resolutions/