Desde San Lázaro

Se acelera la vacunación ante las elecciones

Se apresura la vacunación en vísperas de la elección del 6 de junio, faltaba más.

Se apresura la vacunación en vísperas de la elección del 6 de junio, faltaba más. Conforme a los cálculos que se hicieron en Palacio Nacional, deben estar inoculados el mayor número de mexicanos posible antes de esa fecha, por ello se apura, desde todos los frentes, para que esta meta se cumpla.

Así, por ejemplo, todos los habitantes de la CDMX que tienen más de 50 años, habrán sido vacunados antes del 6 de junio y también mujeres embarazadas, mayores de 18 años y con más de nueve semanas de gestación.

El objetivo es aplicar diariamente 105 mil dosis y se espera que, al menos con la primera dosis, estén vacunados, incluyendo a los maestros, cerca de 2.6 millones de personas en la capital del país.

La instrucción desde la oficina del presidente es que se haga lo que les corresponde a sus colaboradores para ganar la elección. Los candidatos de Morena tienen como una de sus principales ofertas de campaña mencionar que gracias a AMLO se vacuna a todos y además de forma gratuita; por su parte, Mario Delgado se desgañita para dar a conocer que el partido que dirige cedió sus prerrogativas para vacunas, lo que es otra de las mentiras que acuñan, ya que ningún partido político puede etiquetar el uso del dinero regresado. Además de que Morena ha devuelto tan solo 10 por ciento de sus recursos.

En época de campañas, todo mundo ofrece hasta las perlas de la virgen, empero, Morena cree que la ignorancia es propia de los mexicanos o que la idiotez se pega por ósmosis desde ese partido.

Aún en tiempo de elecciones siguen enormes carencias que no se pueden ocultar con dádivas, vacunas, promesas o con mentiras.

Lo cierto es que al partido en el poder y sus aliados ya se les hizo bolas el engrudo en virtud de que no alcanzarán la mayoría simple en la Cámara de Diputados federal y tan solo ganarán seis gubernaturas de las 15 que están en juego.

Desde luego, la estrategia de AMLO es revertir las derrotas que se den en las urnas, por victorias en los tribunales o judicializando los triunfos de algunos candidatos de oposición; al fin y al cabo, tiene a la Fiscalía General de la República, la Unidad de Inteligencia Financiera y la misma Suprema Corte de Justicia de la Nación a su servicio para proceder conforme a sus deseos, tal como está ocurriendo con el desafuero y persecución política del gobernador de Tamaulipas.

Así las cosas, los habitantes del Estado de México, la CDMX, Puebla, Veracruz y las zonas metropolitanas de Monterrey, Guadalajara y León son la población objetivo para concluir la etapa de vacunación antes de la elección; y se preguntará el lector por qué esas entidades son prioritarias para el gobierno, simplemente porque allí se concentran en mayor número de votantes del país.

Hay que acotar que buena parte de los mexicanos que viven en territorio nacional ya se vacunaron en Estados Unidos y muchos de ellos no son necesariamente los de mayores recursos económicos o adultos mayores. A este sector de la población ya no se les puede vender espejitos por votos.

Hay otro sector de la población que se inoculó en México, pero tampoco le darán su voto a Morena por ese “acto generoso del gobierno” ya que saben que es una obligación del Estado protegerlos en su vida y en su salud

En la lectura que harán los expertos en torno a los resultados de la elección, habrá algunos ‘descubrimientos’ que desde ahora se pueden anticipar: la gente ya no se traga las mentiras ni las promesas del partido en el gobierno, al contrario, ha permeado en la sociedad un dejo de decepción y desconfianza en torno a la actuación del presidente de México, quien pinta todas las mañanas un país que solo existe en su imaginación pero que, al contrastarla con la cruda realidad, caen en la cuenta que son puras falacias.

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