Mis Finanzas

¿Seguros de vida o seguros de muerte?

Algunos seguros tienen una recuperación de recursos a cierta edad, pueden ser caros o muy baratos, pero es importante contar con uno.

Los llamados ‘seguros de vida’ cubren más que un fallecimiento; existe una gama de productos con una retribución, como sería uno educacional o dotal, que a cierta edad tienen una recuperación de recursos, me dice Abraham Zetune, director ejecutivo de atención a clientes de Sekura, con quien platiqué para reflexionar sobre este mecanismo financiero.

Él comenta que los seguros buscan proporcionar una continuidad del estilo de vida ante un deceso, pero que también hay otras ventajas asociadas, como por ejemplo el ahorro para el retiro, pues tienen beneficios fiscales.

“De acuerdo con la Ley de Impuesto sobre la Renta, es posible deducir una parte de la prima pagada cuando se trata de un plan personal de retiro y son alrededor de 160-170 mil pesos anuales que se pueden hacer deducibles”.

De hecho, es un excelente uso para el aguinaldo y ayuda a generar disciplina… “no es lo mismo decir quiero ahorrar a que tengas a alguien detrás de ti recordándote”.

Considera que la mejor edad para adquirir un seguro es en la juventud, ya que al ser económicamente productivo y con buena salud es fácil contratarlo. Incluso, debería de formar parte del presupuesto de las familias.

La pandemia a puesto de relieve la necesidad de la cobertura. Según la AMIS, ha tenido que atender más de 127 mil casos de fallecimientos por COVID, llegando a una cantidad de indemnización de cerca de 30 mil millones de pesos.

Las aseguradoras han jugado un rol importante en la contingencia. Por desgracia, el porcentaje de la población cubierta es muy bajo, al ser inferior a 15 por ciento en seguros de vida y en buena medida es por los créditos hipotecarios y de automóviles que obligan a contratarlo. También los empleadores aseguran por vida y gastos médicos mayores, sin haber una intención explícita de las personas.

“Pueden ser caros o baratos, pero es más caro no tenerlos. Uno puede ir escalonando los seguros de acuerdo con los activos de la familia y los ingresos”.

Es posible empezar con esquemas temporales que sólo cumplen con la función del aseguramiento en caso de fallecimiento, sin ningún otro componente. Son por vigencias específicas: 10, 15, 20 o edad 65. La prima se nivela y el costo podría ser de alrededor del uno por ciento de la suma asegurada.

Si deseas escuchar la entrevista completa, te invito a mi podcast Dinero y Felicidad. Puedes hacerlo en Spotify, Apple Podcast o Google Podcast, entre otras plataformas.

¿Piensas adquirir un seguro? Coméntame en Instagram: @atovar.castro

Alberto Tovar

Alberto Tovar

Economista, especializado en negocios y finanzas personales; certificado como coach de vida y equipos. Actualmente es el Director Regional de la Zona Norte de El Financiero. Ofrece conferencias, consultoría y coaching a organizaciones diversas.

COLUMNAS ANTERIORES

‘Silver surfers’: más allá de los 40 en el trabajo
Menopausia y liderazgo: rompiendo el silencio corporativo

Las expresiones aquí vertidas son responsabilidad de quien firma esta columna de opinión y no necesariamente reflejan la postura editorial de El Financiero.