:quality(70)/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/elfinanciero/IRSR5MMC7NA4XNIFV77HLRP4FQ.jpg)
El 26 de septiembre se cumplieron nueve años de la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa, por lo que se realizó una marcha en el Centro Histórico de la Ciudad de México.
Padres y madres de los normalistas reclamaron al Gobierno mexicano que no se les entregó la información sobre las grabaciones de conversaciones del Ejército.
En el caso han estado involucrados varios personajes que intentan resolver que fue lo que pasó aquella noche en Iguala.
En el Gobierno de Andrés Manuel López Obrador se le asignó a Alejandro Encinas indagar en la desaparición de los jóvenes.
Quinto Elemento y una entrevista al exfiscal encargado del caso, revelaron lo que ocurrió en un desayuno donde se reunieron AMLO, Encinas y el fiscal general de la República, Alejandro Gertz Manero, donde hablaron de los 43 normalistas desaparecidos.
¿Qué pasó en el desayuno de AMLO, Encinas y Gertz Manero?
La instrucción: Cómo el gobierno dinamitó la investigación del caso Ayotzinapa, investigación de Quinto Elemento, detalla que Gertz Manero le solicitó a Omar Gómez Trejo, entonces titular de la Unidad Especial de Investigación y Litigación para el Caso Ayotzinapa (UEILCA) una ficha de avances en la investigación para presentarlos en un desayuno donde estarían presentes AMLO, Adán Augusto López, Arturo Zaldívar y Encinas.
:quality(70)/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/elfinanciero/EEEIXT4SNZFEBINGWURTJ5RUIM.jpeg)
Gómez Trejo no sabía de la presencia de ellos, pero esa mañana todos se pondrían de acuerdo para dar luz verde a una serie de acciones que haría ‘volar’ la investigación del caso Ayotzinapa y que también provocaría su renuncia.
El desayuno se realizó el 15 de agosto, según Gómez Trejo. Días después, Gertz Manero le comunicó una ‘decisión de estado’, que hizo posible agilizar órdenes de aprehensión contra 16 militares y que en 24 horas se armara la carpeta de investigación para judicializar a Jesús Murillo Karam.
Gómez Trejo viajó a Israel a atender un asunto relacionado también con los 43 desaparecidos. Fue a gestionar y platicar con las autoridades los cargos contra Tomás Zerón. El objetivo era cooperación bilateral para detenerlo y regresarlo a México.
El exfiscal detalla que cuando regresó ya no tenía policías y no podía seguir investigando. Le habían ordenado una auditoría. También ya había un equipo que quería cancelar las órdenes de aprehensión a militares.
Encinas le explicó lo que pasaba: la pausa era porque había judicializado a militares, acción que fue una orden. Se le dijo que se excedió en el número de elementos.
Gómez Trejo ya no podía investigar, se le hizo a un lado y se le sugirió denuncias las irregularidades.