Mexicana de Aviación vuela con 16 pilotos que son militares

Mexicana de Aviación, ahora bajo el control de la Secretaría de la Defensa Nacional, está operando sus vuelos con personal militar y, en su plantilla de empleados, se encuentran 16 pilotos castrenses que son quienes capitanean las aeronaves de la empresa estatal.

Información obtenida por El Financiero vía transparencia da cuenta de la presencia militar en la paraestatal que comenzó a volar el 26 de diciembre con una flota reducida de aeronaves, pero que, según el ejército “16 pilotos aviadores de esta Fuerza Aérea se encuentran desempeñando actividades de su especialidad en la Aerolínea del Estado Mexicano S.A. de C.V”.

Mexicana comenzó a volar con solo cinco aeronaves dado que el gobierno no pudo conseguir una decena de aeronaves, debido a la falta de equipos en el mundo, además que la propia administración dirigida por Andrés Manuel López Obrador ha tercerizado la renta de las aeronaves a SAT Aero Holdings, una empresa basada en Estados Unidos.

La Sedena agregó en su respuesta que “en el concepto que no se cuenta con información respecto al personal civil”, por lo que los vuelos de la Aerolínea del Estado Mexicano están siendo operados en su totalidad por personal militar a cargo de pilotar las aeronaves arrendadas a TAR y las cedidas por el propio ejército para la conformación de la línea aérea.

La paraestatal aérea tiene 18 destinos en sus itinerarios-incluido el AIFA, que funciona como su base principal de operaciones y en donde pernoctan sus aeronaves-, los cuales aún están lejos de consolidarse, pues se han registrado múltiples vuelos con apenas un pasajero.

Además, la empresa aún no tiene un sistema estable de reservas, y los pasajeros tienen que acudir al aeropuerto desde donde vuelen con una anticipación de 2.5 horas porque el sistema de obtención de pase de abordar solo puede hacerse en mostrador.

Cabe recordar que entre 2024 y 2029, la aerolínea tendrá pérdidas por 2 mil 316 millones 603 mil 110 pesos y 60 centavos, recursos que Hacienda aceptó transferirle para cubrir el déficit financiero de la nueva empresa.