Financial Times

Obama intenta redefinir relaciones entre EU y Arabia Saudita

Con un aire de “ten cuidado con lo que deseas”, las consecuencias del esfuerzo de Barack Obama para redefinir las relaciones con Arabia Saudita se verán cuando visite Riad el miércoles y jueves para una reunión bilateral y una cumbre regional.

Mucho antes de ser presidente, Barack Obama quería establecer un poco de distancia entre EEUU y Arabia Saudita. Durante un discurso en 2002 en contra de la guerra en Irak que finalmente impulsó su candidatura para la presidencia, Obama hizo referencia a Arabia Saudita como "nuestros presuntos aliados".

En un artículo llamado la Doctrina de Obama, publicado el mes pasado en la revista The Atlantic, citaron una pregunta que le hizo el primer ministro australiano Malcolm Turnbull al presidente: ¿"No son sus amigos los saudíes"? Obama contestó: "Es complicado".

Con un aire de "ten cuidado con lo que deseas", las consecuencias del esfuerzo de Obama para redefinir las relaciones con Arabia Saudita se verán cuando visite Riad el miércoles y jueves para una reunión bilateral y una cumbre regional.

Sus anfitriones saudíes lo recibirán con cierta cólera controlada debido al comentario del presidente que describiera al país como "oportunista" y estarán esperando a que pasen las elecciones para ver si el próximo ocupante de la Casa Blanca intentará restablecer las relaciones cercanas que tuvieron los dos países en las décadas de 1980 y 1990.

Pero también será recibido por una familia real que de alguna manera ha tomado en serio al presidente y se ha responsabilizado más de los asuntos de seguridad de la región, a veces sin concordar con el punto de vista de la Casa Blanca.

"Queremos que los saudíes sean más responsables de su propia seguridad; pero cuando lo hacen, puede ser inefectivo y desestabilizar la región", dice Frederic Wehrey del Carnegie Endowment.

El jueves, Obama se encontrará con líderes del Gulf Cooperation Council (GCC), el grupo regional que la administración ha motivado a colaborar más estrechamente para enfrentar las amenazas de Irán y otras cuestiones de seguridad.

Ashton Carter, secretario de defensa de EU, se reunirá con sus homólogos del GCC el martes para discutir la defensa de misiles y cómo protegerse de ataques cibernéticos.

James Smith, el embajador de EU en Arabia Saudita durante el primer periodo de Obama, dice: "Desde el principio, había una estrategia de motivarlos a ser más autosuficientes".

A la vez que se les ha pedido tomar más responsabilidad, los saudíes han encontrado muchas razones para cuestionar el compromiso de Obama. Aun antes de la negociación del acuerdo nuclear con Irán, su mayor rival regional, Riad criticó al presidente por no haber apoyado al ex líder egipcio Hosni Mubarak en 2011 y por no haber hecho más para vencer el régimen de Assad en Siria.

La culminación de estas frustraciones ha sido la campaña liderada por Arabia Saudita en Yemen la cual, según Riad, tiene la meta de restablecer un gobierno legítimo derrocado por una rebelión respaldada por Irán. Aunque EU ha proporcionado un poco de apoyo militar, en privado ha criticado a Riad por el impacto humanitario del conflicto.

La irritación de Arabia Saudita contra la administración Obama surge con el avivamiento del tipo de críticas de la sociedad saudí que eran comunes en EU después de los ataques de 9/11. De hecho, un proyecto de ley bipartidista que eliminaría la inmunidad legal de los funcionarios saudíes que pudieran haber estado involucrados en ataques terroristas en EU tiene bastantes posibilidades de pasar en el Senado de EU este año.

Riad quiere una señal de que EU se mantendrá firme en su compromiso con la región, y que impedirá que Irán se aproveche del acuerdo nuclear que se firmó el año pasado.

"Cuando nos reunimos con los estadounidenses, es obvio que tenemos una relación especial y enérgica. Creo que EU ya ha confirmado la fuerza de nuestras relaciones", dice un asesor para Arabia Saudita.

También te puede interesar: 

Una tercera opción para resolver la crisis en Venezuela

Ciudad de Río 'prácticamente lista' para los Juegos Olímpicos

Los brasileños empiezan a clamar: fuera todos

También lee: