La economía digital mexicana tiene el potencial de incrementar su peso dentro del Producto Interno Bruto nacional (PIB), del 3 por ciento que detenta actualmente hasta el 4 por ciento en el mediano plazo, de acuerdo con estimaciones de la Asociación Mexicana de Internet (Amipci).
Para conseguirlo, el país requiere aumentar el número de internautas, la penetración de banda ancha y resolver temas de seguridad y confianza para realizar transacciones en internet.
"En los próximos años estimamos que México alcance el parámetro regional del 4 por ciento. Hay países como Brasil o Argentina donde el PIB digital ya llegó el 6 por ciento, pero en este último hay un escenario de pocos habitantes y alta conectividad", comentó Carlos Ponce, presidente de la Amipci, durante su participación en el eBusiness Week MX 2014.
La economía digital comprende las industrias de Tecnologías de la Información, el comercio electrónico, el mercado de bienes y servicios facilitados por la conexión a la web, cómputo en la nube, gasto público en tecnología e inclusión financiera a través de la banca en línea.
"El reto es la conectividad, que haya más usuarios, más clientes de comercio electrónico y llevar esta cultura fuera a nivel nacional", dijo.
La Amipici espera que el e-commerce presente una tasa de crecimiento de entre el 30 y 35 por ciento anual para cerrar el 2014, en comparación con el valor de 9 mil 200 millones de dólares que alcanzó el año pasado. Mientras que el gobierno mexicano tiene como meta aumentar del 6.2 por ciento al 15 por ciento el número de internautas nacionales que realizan compras en línea hacia 2018.
Francisco Varela, director adjunto de la Estrategia Digital Nacional, apuntó que el reto es conectar al 56.5 por ciento de la población a internet, además de sentar las bases para el desarrollo del ecosistema.
