Las personas con intolerancia a la lactosa pueden consumir estos tipos de queso sin mayores complicaciones.
La intolerancia a la lactosa se da principalmente en la población adulta, y es la incapacidad para digerir el azúcar de la leche.
Eduardo Torreblanca relata el caso de Gastronomía molecular, una empresa que creó una bebida adecuada para intolerantes a la lactosa; sin embargo, esta no siguió recibiendo el apoyo del instituto, pese a que podía ayudar a revertir desnutrición infantil.
Los alumnos que crearon este alimento dijeron que los niños deben comer las gomitas entre 10 y 15 minutos antes de ingerir lactosa para reforzar el estómago.