Mauricio Jalife

Avance histórico en la lucha contra la piratería en ‘e-commerce’

Hace una década las plataformas de comercio electrónico rehusaban reconocer su responsabilidad en el tráfico ilegal de mercancías pirata.

El anuncio que hace Mercado Libre sobre sus nuevos mecanismos para la detección de productos pirata en su plataforma de comercio electrónico, puede llegar a ser un parteaguas en la lucha contra el contrabando y la falsificación de marcas. El programa es resultado del acuerdo alcanzado entre la plataforma y la International Anti-counterfeiting Coalition (IACC), que es una de las organizaciones privadas mas relevantes en la lucha contra la piratería, y que reúne a marcas de la talla de Victoria´s Secret, Tommy Hilfiger, Under Armour y Levi´s, entre muchas otras.

Hace todavía una década, las plataformas de comercio electrónico que empezaban a despuntar eran totalmente renuentes a reconocer su responsabilidad en el tráfico ilegal de mercancías infractoras de derechos de propiedad intelectual. Su argumento central descansaba en el alegato de que se trataba de un medio ‘neutral’ de conectar a compradores y vendedores, que no podía responsabilizarse por la legalidad de los productos y marcas involucrados. Evidentemente, una postura de ese tipo necesariamente resultaría insostenible, empezándose a dictar numerosas resoluciones, en importantes jurisdicciones, que claramente señalaban su rol de colaboración en la infracción.

La comercialización de falsificaciones ha llegado a niveles de tal magnitud, que las propias plataformas han reconocido que seguir en esa tendencia lastimaría la confianza de los compradores, limitando el potencial de crecimiento de este nuevo formato comercial. Sin embargo, dos importantes factores han dificultado elevar los controles de productos sospechosos o ilegales: por una parte, la proliferación de vendedores ofertando marcas conocidas de manera atomizada, por medio de una diversidad de ‘perfiles’, y por el otro, la dificultad para acceder a información acerca de los infractores, por virtud de las restricciones que la legislación de protección de datos impone.

Si a este escenario agregamos las dificultades que plantea la distinción entre productos auténticos legalmente comercializados a la luz de la figura de importación paralela y los que constituyen falsificaciones o clones, o sencillamente no son ‘oficiales’ de la marca respectiva, la propuesta de Mercado Libre-IACC se vuelve crucial hacia el futuro.

La herramienta desarrollada para este fin se basa en algoritmos que permiten la detección de objetos y logotipos por medio de tecnología de inteligencia artificial, altamente eficaz, alimentada por la información que los propios titulares de las marcas aportan para favorecer los resultados. Sin duda, como ha sucedido en otros mercados como los de música y películas, es la tecnología la que dispara los niveles de copiado ilegal, pero es también la tecnología la que ofrece las mejores soluciones para contener el fenómeno.

Así como hemos presenciado la operatividad que tiene la figura del ‘aviso y retirada’ que implementó la reforma de derechos de autor de julio del año pasado, que ha permitido bajar cientos de miles de videos con contenidos ilegales de sitios como YouTube, de manera sencilla y expedita, es predecible que, ante la presencia de productos ilegales en las plataformas, estaremos arribando a la posibilidad real de combatirlos de manera contundente.

Es necesario, ahora, que los titulares de marcas afectadas, y las propias autoridades del sector, se sumen al esfuerzo para tener una versión acabada de esta novedosa forma de lucha contra el tráfico de producto ilegales.

Mail: mjalife@jcip.mx

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