El Poder Judicial no va a caer, no va a caer
Otra vez, universitarios, el Poder Judicial y la ciudadanía salieron a tomar las calles en contra de la venganza-reforma judicial de AMLO. A pesar de que el día se sentía nostálgico y el trayecto del Ángel a Reforma e Insurgentes fue raro porque, a pesar de que todos iban convencidos y comprometidos, fue un camino silencioso, era una marcha silenciosa, un cortejo fúnebre. Sin embargo, al llegar al cruce de Reforma e Insurgentes todo cambió, nadie podía dar un paso más.
Miles de mexicanos frente al Senado estaban escuchando al ministro en retiro José Ramón Cossío, y ahí comenzaron a vibrar en la misma sintonía. Dábamos por hecho que todos unidos, niños, mujeres, personas con discapacidad, pero sobre todo jóvenes, éramos el México que soñábamos en democracia. Con decirles que el exministro tuvo que ceder al grito unísono de “¡no están solos!”, cuando salieron varios legisladores del edificio que está enfrente del Senado. Aquí el video.
Cuarenta y tres vuelve a ser el número que marcará un sexenio, pero en esta ocasión será con un cambio de régimen.
Entonar el Himno Nacional fue un momento épico; a los miles de mexicanos frente al Senado se les enchinó la piel… se nos enchinó.
Recordamos que si se está votando el plan C es porque la oposición paró el plan A y el plan B, que está defendiendo la división de poderes y la democracia.
Pues si un senador de los 43 nos traiciona o cede a las presiones, viviremos en una dictadura por el capricho-venganza de AMLO. Y derivado también de la sobrerrepresentación espuria, gracias a los abyectos del INE y Tribunal Electoral, salvo Claudia Zavala, Martín Faz, Jaime Rivera (INE) y Janine Otálora (TEPJF).
“Joven consciente defiende su presente”, coreaban los alumnos del ITAM.
México vale la pena la lucha, y como me dijo Guadalupe Acosta Naranjo, “si votan a favor Claudia Sheinbaum no tomará protesta en San Lázaro. Lo hicimos, Lourdes.
La gente quiere oposición, no tibieza”.