Entorno Económico

La estrategia de la Fed

Tanto la Fed como cualquier otro banco central se encuentran operando bajo niveles de incertidumbre excepcionales, a lo cual deberían responder con un perfil estratégico.

Desde la última vez que la Fed ofreció sus proyecciones, la inflación subyacente ha consolidado su trayectoria a la baja hacia un nivel quizás inferior al pronosticado. En tanto, la actividad económica ha probado ser más resiliente a lo contemplado, sugiriendo una mejor proyección hacia delante. No obstante, si algo hemos aprendido es lo cambiante y fluido que puede resultar el escenario local y global. En este sentido, vale la pena recordar que tanto la Fed como cualquier otro banco central se encuentran operando bajo niveles de incertidumbre excepcionales, a lo cual deberían responder con un perfil estratégico. A continuación, ofrezco tres reflexiones al respecto.

Primero, en este punto, si la Fed decide borrar de sus famosos puntos un alza adicional antes de que concluya el año, creo que se estaría cerrando las puertas a tener cierto grado de maniobra para un último esfuerzo de señalización en los siguientes meses. Los riesgos inflacionarios podrían mantenerse al alza y quizás no sería el mejor momento de ofrecer al mercado un mensaje claramente “paloma”.

Segundo, creo que en este punto es mucho más relevante el periodo por el que la Reserva Federal pudiera mantener las tasas altas que la discusión respecto a si restan otros 25 o 50 puntos base en alzas en los meses siguientes. A este respecto, veo difícil que la Fed trate de ser mucho más específica respecto a cuándo podría estar lista para normalizar las condiciones monetarias. Creo que la señal la veremos muy cerca de la primera acción y no con meses de antelación.

Tercero, mientras la posibilidad de que una recesión profunda se materialice ha ido mermando, el escenario de “aterrizaje suave” se ve cada vez más factible. Dicha expectativa sí que podría explicitarse esta misma semana. Lo anterior sería el caso si la Fed optara por revisar ligeramente a la baja sus proyecciones de inflación para 2024, al tiempo que podría ajustar un poco al alza sus previsiones de crecimiento económico para ese mismo año.

Opcionalidad es una palabra clave en estos días, ningún banco central quisiera cerrarse las puertas o atarse de manos. En el camino, la misma realidad los podría llevar a modificar sus escenarios, y no necesariamente en el sentido que ellos esperan.

Joel Virgen es el analista económico del sector financiero con sede en Nueva York, EUA. Sus opiniones no necesariamente representan las de una institución financiera en particular.

Twitter: @joelvirgen

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