Signos y Señales

Respuesta a la crisis, innovación digital

Para la ASF la crisis sanitaria se tradujo en una oportunidad para buscar soluciones que aseguraran la continuidad del trabajo, pero no contaba con acceso remoto a la información del gobierno.

El autor es el auditor superior de la Federación .

La pandemia por Covid-19 generó una realidad inédita y retos que han puesto a prueba nuestra capacidad para responder rápidamente a las nuevas circunstancias, aprovechando la revolución digital. La eficacia de la fiscalización superior no es ajena a esta 'nueva normalidad', marcada por restricciones significativas en la interacción y desplazamiento de las personas y, por ende, de los equipos de auditores e incluso del personal de los entes auditados.

Para la Auditoría Superior de la Federación (ASF), la crisis se tradujo en una oportunidad para reflexionar, innovar y buscar nuevas soluciones que aseguren la continuidad de nuestro trabajo. Ello nos llevó a implementar diversas medidas para fortalecer el trabajo fiscalizador y facilitar en las áreas adecuadas las labores a distancia, sin desaparecer el presencial en determinadas circunstancias, como las revisiones en las comunidades más incomunicadas.

En el aspecto tecnológico, si bien contábamos con los sistemas informáticos necesarios para que los auditores pudieran continuar sus labores desde casa, detectaron varias problemáticas, por ejemplo, no se contaba con acceso remoto a los sistemas de información del gobierno, que les permitieran realizar, a distancia, las auditorías programadas.

Lo anterior hizo patente la brecha de vulnerabilidad de acceso a la información a la cual nos enfrentamos. En una crisis como la actual, es indispensable que los gobiernos cuenten con sistemas que puedan garantizar que su operación y la prestación de los servicios continúen sin interrupciones. En este sentido, es necesario que los auditores puedan acceder a los sistemas de información gubernamentales de forma remota, tanto para realizar auditorías como para hacer un monitoreo continuo del desarrollo de las acciones emprendidas por las autoridades.

Cabe destacar que, en los últimos dos años, la ASF diseñó una estrategia de cambio institucional, a través de la implementación de nuevas técnicas de auditoría y la incorporación de nuevas tecnologías en sus procesos de fiscalización, en pro de la transparencia y la rendición de cuentas. Sin embargo, la crisis sanitaria originada por el Covid-19 obligó a la ASF a acelerar la puesta en marcha de esta estrategia, especialmente en aquellos aspectos vinculados con la realización de procesos de fiscalización no presenciales por medio de la utilización de sistemas tecnológicos para así coadyuvar en la disminución de la propagación del virus.

Es así como la pandemia por Covid-19 obligó a las entidades de fiscalización superior a adaptarse velozmente a una nueva realidad para asegurar la continuidad de su labor fiscalizadora sin poner en riesgo la salud y bienestar de su personal auditor y sus familias. En este sentido, la ASF adoptó una serie de medidas con la finalidad de fortalecer tanto su labor fiscalizadora como su organización interna para hacer frente a la emergencia sanitaria.

Dentro del primer paquete de medidas, se encuentran la adopción de nuevas herramientas tecnológicas en el trabajo de auditoría. Muchas de estas medidas ya formaban parte de la estrategia de cambio institucional diseñada e implementada por la ASF, la cual debió acelerarse para poner en marcha los procesos de auditorías digitales o a distancia.

Así, la ASF creó herramientas como el Buzón Digital ASF, el SICAF y el Sistema Integral de Citas, las cuales nos permiten dar continuidad a la revisión de la Cuenta Pública en un contexto de emergencia y, además, ayudan a incrementar el alcance e impacto de la tarea fiscalizadora. Su implementación ya está en proceso, como lo demuestra el evento de ayer en el estado de Guerrero.

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