Clemente Ruiz Duran

Ampliando las fronteras de la producción

El secretario Rogelio Ramírez de la O presentó un balance de la actual administración y planteó perspectivas para el futuro.

En la inauguración de la Cátedra SHCP, el lunes pasado en el Palacio de la Autonomía Universitaria, el secretario de Hacienda Rogelio Ramírez de la O presentó un balance de la actual administración, poniendo a debate la evolución de la economía en los últimos años, y planteando perspectivas para el futuro. Su exposición inició señalando que la reconstrucción de la economía se fundamento en cuatro pilares:

1) Reforzar la oferta agregada nacional, mediante el mantenimiento del tratado de América del Norte, dando certidumbre fiscal, aumentando la eficiencia recaudatoria y mejorando el uso del presupuesto público.

2) Dar una perspectiva regional al crecimiento, señalando que ante la ineficiencia de los mercados regionales para generar mayor inversión se había buscado el desarrollo a través de proyectos claves para incentivar el crecimiento en regiones del sur, noreste y Bajío mediante una mezcla de inversión pública que abriera el espacio para la inversión privada, como es el caso del proyecto del istmo de Tehuantepec.

3) Reforzamiento del crecimiento mediante una recomposición del consumo agregado centrándose en los deciles del I al VIII, mediante el aumento a los salarios y apoyos a las familias.

4) Mantener el balance fiscal dentro de rangos que permitieron tener acceso a los mercados internacionales.

Un debate interesante que abrió en su exposición fue el de los balances macroeconómicos. Señaló que el tiempo no esta en los equilibrios estáticos, sino que es necesario introducir una visión dinámica sobre la cual el gobierno y el sector privado toman decisiones en donde el ahorro viene de tiempo atrás y la inversión va de tiempo adelante. Esta perspectiva dinámica ayuda a resolver gran parte de los desequilibrios temporales.

Un punto interesante de su exposición fue un análisis dinámico de la inversión, mostrando que la caída de la inversión que se da en la economía mexicana entre 2015 a 2021, se logra recuperar a partir de 2022 y alcanza 24.4 porciento en 2023. Esta recuperación de la inversión requiere analizarse con detenimiento ya que esto muestra que el ciclo de baja inversión de la economía mexicana parece estarse superando, abriendo posibilidad de mayor crecimiento económico. Sin embargo, la tasa de ahorro parece que no se está recuperando, abriendo una brecha que podría cuestionar la estabilidad del crecimiento de la inversión para el futuro inmediato y sería uno de los dilemas que tendría que resolver el nuevo gobierno. En esta perspectiva, se abre un escenario que requerirá ser resuelto para mantener el crecimiento de la economía y poder adquisitivo de los grupos de mas bajos ingresos.

Se dejo entrever en la exposición que este reforzamiento del crecimiento de la inversión podría derivar de un refuerzo proveniente de la inversión extranjera sugiriendo, sin decirlo, que el esquema de las finanzas públicas se ha beneficiado ya de la política estadounidense del nearshoring y que la intención es reforzar esa vía como mecanismo de aliento al crecimiento de la economía mexicana. De hecho, en tanto el responsable de las finanzas públicas mencionaba esta situación, se realizaba en Phoenix, Arizona una reunión preparatoria sobre la renegociación del Tratado de Libre Comercio (TMEC) entre las encargadas directamente de la renegociación, la secretaria de Economía de México, Raquel Buenrostro, la representante comercial de Estados Unidos, Katherine Tai y la ministra de Promoción de Exportaciones, Comercio Internacional y Desarrollo Económico de Canadá, Mary Ng. La apuesta apunta al reforzamiento del TMEC como mecanismo no sólo comercial, sino como un mecanismo de reforzamiento del marco macroeconómico del país.

La plática cerró con un esquema de perspectivas futura para la economía mexicana, señalando que en el corto plazo es asegurar la preservación de los balances y en los presupuestos el balance ingreso-gasto y la estabilidad de la deuda a Producto Interno Bruto. Para lo cual se busca blindar más la economía y la confianza de los mercados ante cualquier riesgo de choque externo, como serían las elecciones en Estados Unidos, o una disrupción del comercio Estados Unidos- China- México, o bien los conflictos geopolíticos globales que pudieran disparar las tasas de interés. Señalando que el propósito es construir un modelo de desarrollo propio que permita aprovechar las oportunidades de más inversión privada incluyendo la inversión extranjera para relocalizar plantas y empleo que sirvan para fortalecer el desarrollo del país.

Esta plática se puede considerar como un adelanto de lo que se plantea como política macroeconómica para los próximos años, si la administración hacendaria se preserva después de las elecciones de la próxima semana.

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