Claudia Olguin

Decisiones y Mercado

Claudia Olguín indica que el mercado de oficinas de la Ciudad de México (CDMX) cierra el primer trimestre cuesta arriba.

Con un inventario y tasa de disponibilidad crecientes el mercado de oficinas de la Ciudad de México (CDMX) cierra el primer trimestre cuesta arriba.

Si bien algunas firmas de servicios inmobiliarios ven un nuevo equilibrio post-pandemia, los principales corredores en este mercado aún no registran una toma de decisiones generalizada de los inquilinos respecto a los patrones de uso de espacios de trabajo. Cushman & Wakefield (C&W) destaca en su reporte de inicio de año el efecto que los modelos flexibles tienen en el uso de espacios y empleos móviles en algunos corredores.

Esta tendencia se basa en el rol que aún tiene en las organizaciones el espacio tradicional de espacios de oficinas, que está dejando un aumento en renovaciones de contratos de arrendamiento por parte de empresas que aprovechan las condiciones favorables con los propietarios de inmuebles. La tasa de disponibilidad general de esta firma se ubica en 19.6%, sin embargo, otras previsiones como la de Newmark para el mismo lapso y mercado es de hasta 25.5% con un inventario que por vigésima ocasión creció al ubicarse ya en 8 millones de m2 de área rentable.

Un mayor inventario y la baja ocupación, provocaron que la absorción neta interrumpiera su tendencia al alza y haya caído de nuevo hasta una tasa negativa de 72 mil 502m2. Lo anterior es consecuencia de que si bien algunos corredores registran movimiento, otros como Insurgentes, Periférico Sur y Santa Fe siguen sufriendo desocupaciones e ingresos de nuevos edificios al mercado.

Esto representa que existen alrededor de 1.9 millones de m2 de espacio de oficinas clase A vacíos, además del efecto que dejaron en el mercado las restricciones rígidas de vida derivadas de la pandemia.

Una de ellas es el incremento en las desocupaciones de espacios de oficinas en Insurgentes, Periférico Sur y Santa Fe. Caso contrario fueron Lomas Altas, Lomas Palmas y Norte.

Entre los factores que revelan el estado del mercado de oficinas, figura la estabilización de precios de salida, que tras la caída de la segunda mitad de 2021, experimentaron en los edificios clase A un ajuste de 1.3% respecto al mismo período de 2021, con un promedio de $22,88 dólares por m2 de renta al mes.

Ambas previsiones de mercado coinciden en distintos pronósticos, en especial que la Ciudad de México tiene como fortaleza estructural su bono demográfico y la sofisticación del entorno económico y de negocios.

En el análisis del inicio de año se mantiene la idea de que una vez que las empresas revisen las nuevas estructuras de equipos de trabajo, vendrá un período de equilibrio, fundamentalmente porque en las empresas se requieren espacios dónde fomentar la colaboración e identidad corporativa.

No obstante, independiente a la indefinición de los patrones de uso de espacios corporativos, basado en la incógnita en la aplicación de los modelos híbridos, un factor que incidirá en los períodos de incertidumbre en el mercado es la débil recuperación económica. Todas son razones que evidencian los claroscuros con que debe entenderse la evolución de este mercado. Para muestra está el proceso de reconversión de edificios de oficinas a uso habitacional, que si bien se ve como un fenómeno simbólico, acumula a la fecha 50 mil m2 de edificios clase B.

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